Los datos de un usuario promedio de la red social Facebook están registrados en las bases de datos de unas 48.000 empresas que ofrecen sus servicios a través de la plataforma, según una reciente investigación llevada a cabo entre usuarios de Estados Unidos.

Esto es lo que ha determinado la organización sin ánimo de lucro Consumer Reports con base en un estudio con el que busca demostrar qué datos de los usuarios tienen las empresas a su alcance en esta red social.

Para llevarlo a cabo, un total de 709 voluntarios de Estados Unidos emplearon la herramienta ‘Descarga tu información’ y compartieron sus datos con los investigadores tras una iniciativa propuesta por TheMarkup. De este servicio se desglosan dos conjuntos de datos: los que provienen de las audiencias personalizadas y los que se recopilan a través de los eventos.

Según una investigación, la red social comparte la información con las empresas que pautan en su plataforma. | Foto: SEMANA

Las audiencias personalizadas son listas con identificadores, como direcciones de correo o teléfonos móviles, que los anunciantes de Facebook transfieren a la plataforma para orientar sus anuncios. Esta publicidad se dirige a sus destinatarios empleando datos recopilados de los propios clientes de la compañía anunciante o datos adquiridos a intermediarios de datos, entre otros métodos.

El otro formato de recopilación de datos, eventos, reúne las interacciones que el usuario ha tenido con una marca, incluso aquellas que se han dado fuera de las aplicaciones de Meta. Así, se clasifican como eventos acciones como, por ejemplo, visitar una página web, subir de nivel en un juego o visitar una tienda física, tal y como matiza The Markup.

Si bien la organización es consciente de que el conjunto de datos que han obtenido como resultado del análisis “no es representativo de la población estadounidense en su conjunto”, también considera que este estudio ayudará a mejorar “la comprensión de los investigadores sobre la economía de la vigilancia”.

Uno de los resultados más “sorprendentes” que arroja este estudio, en el que se busca conocer quién puede compartir los datos de los usuarios, es que los datos de un usuario promedio de Facebook están al alcance de casi 48.000 empresas diferentes, y que un total de 186.892 empresas habían proporcionado datos de las 709 personas que participaron en el estudio.

Asimismo, la investigación determina que, en promedio, cada participante de la investigación estaba representado en los datos compartidos por una media de 2.230 empresas anunciantes diferentes de la plataforma, aunque algunos de ellos fueron identificados por más de 7.000 organizaciones.

En cualquier caso, Consumer Reports matiza en el documento que estas cifras pueden variar debido a que Facebook “no tiene reglas claras sobre cómo se identifican las empresas” ante los consumidores, de quienes recopilan los datos, por lo que el número podría variar si estas no lo hacen con nombres de dominio (.com, por ejemplo) o nombres de empresas razonablemente identificables.

PARIS, FRANCE - OCTOBER 06: In this photo illustration, the Facebook logo is displayed on the screen of an iPhone on October 06, 2021 in Paris, France. Frances Haugen, a former employee of the Facebook social network created by Mark Zuckerberg, told the US Senate on October 05 that Facebook was prioritizing its profits at the expense of security and the impact of the social network on young users. To support her claims, Frances Haugen draws on her two-year experience as a product manager at Facebook and on the thousands of documents she took with her last spring, grouped together under the name of "Facebook Files ". (Photo illustration by Chesnot/Getty Images) | Foto: SEMANA

Asimismo, se indica que solo el 34 por ciento de las empresas presentes en los datos de la muestra proporcionaron una URL que enlazaba su perfil con el sitio web de la empresa, de modo que el resto de ellas mostraban denominaciones difíciles de identificar (el 7%) o asociar con un negocio en particular.

Entre algunas de las empresas que sí se identificaron correctamente en el estudio se encuentran Heineken, Macy’s, Amazon, Walmart o The Home Depot, que fue el minorista que apareció con mayor frecuencia en los datos recopilados de Facebook. En este sentido, la investigación apunta que el corredor de datos LiveRamp, con sede en San Francisco (Estados Unidos), apareció en el 96 por ciento de los datos de los participantes.

Desde la organización creen que “este tipo de seguimiento persistente” de los usuarios de la plataforma de Meta “sería mucho menos común si las leyes de privacidad incluyeran” medidas más estrictas para el control y la manipulación de los datos de los usuarios.

In this photo illustration the Facebook logo seen displayed | Foto: SEMANA

De ahí que apunten que los legisladores estadounidenses “podrían aprender de los esfuerzos en curso de Europa para mejorar la transparencia en el ecosistema publicitario” a través de la Ley de Mercados Digitales (DMA, por sus siglas en inglés).

Esta exige a los países de la Unión Europea (UE) que las grandes plataformas ‘online’ conserven todos los anuncios que han mostrado a los usuarios durante al menos un año desde que apareciera dicho contenido publicitario por última vez.

“Este es un mecanismo de supervisión crucial que permite a los consumidores e investigadores realizar un estudio y un análisis histórico de los archivos de anuncios para buscar aquellos que fomentan el fraude, son discriminatorios o causan daño al consumidor”, según esta organización.

Con ello, Consumers Reporter ha subrayado que, aunque Facebook disponga de una herramienta de descarga de datos y que esta suponga “un paso claramente positivo” para brindar a los usuarios información y control sobre cómo se utilizan los datos, la compañía “debe ir un paso más allá” de sus obligaciones legales y ser más exigente con las empresas.

Esto, debido a que a muchas de ellas se les permitió incluir su nombre como una serie de cifras y letras o términos ambiguos “para que no se pudieran asociar con una entidad corporativa”. Por tanto, la plataforma “debería garantizar que la calidad de los datos esté estandarizada y sea inteligible para los consumidores”.