Durante el verano, el aire acondicionado se vuelve una opción indispensable para mantener una temperatura confortable y evitar que el calor afecte las actividades diarias, como dormir, trabajar o estudiar.
Si bien las funciones pueden variar según el modelo, una característica común es la capacidad de controlar el flujo de aire que circula en el espacio, lo que permite a los usuarios ajustarlo según sus necesidades y teniendo en cuenta las condiciones climáticas del momento.
Aunque el aire acondicionado es una herramienta indispensable en la vida moderna, su uso constante puede resultar en un aumento significativo en la factura de electricidad cada mes. Sin embargo, implementando algunos trucos y consejos, es posible minimizar este gasto y hacer que el equipo sea más eficiente.
Un aspecto crucial a tener en cuenta es la limpieza adecuada del aire acondicionado. Mantenerlo limpio no solo mejora la calidad del aire, sino que también prolonga su vida útil y ayuda a reducir el consumo de energía.
Los expertos recomiendan prestar especial atención a los gases fluorados presentes en estos aparatos, los cuales deben ser revisados y reparados por profesionales para evitar posibles daños. No obstante, existen procesos de limpieza simples que pueden realizarse en casa sin la necesidad de la ayuda de un técnico especializado. Estos procedimientos son sencillos y no requieren un esfuerzo considerable.
Lo primero que debe hacer es limpiar los filtros. Si son de plástico, generalmente se encuentran en una ubicación visible, lo que facilita su extracción. En el caso de los filtros portátiles, suelen estar en la parte trasera del dispositivo. Independientemente de su tipo, puede lavarlos con agua fría o templada; evita usar agua caliente, ya que esto podría deformarlos. No hay un jabón específico requerido para la limpieza, pero puede usar detergentes líquidos suaves. Una vez limpios, déjelos secar al aire libre, evitando la exposición directa al sol.
Además, es importante aspirar el polvo acumulado, especialmente en la evaporadora. Esto puede hacerse con una aspiradora doméstica. Después, humedezca un paño con un desinfectante y páselo sobre la zona y la tapa. Finalmente, cierre la unidad interior.
Es importante tener en cuenta que, a menudo, se pueden acumular malos olores y moho en los aires acondicionados. Según explican los profesionales, esto ocurre porque algunos equipos, cuando funcionan en modo frío, producen evaporación y condensación, lo que genera la acumulación de humedad en la bandeja del split que se encuentra en la parte inferior. Si el agua no se drena adecuadamente, puede estancarse y provocar estos problemas. Para prevenirlos, limpie la bandeja con agua y un desinfectante, dejar actuar durante 5 minutos y luego retirar. Si es necesario, repita el proceso hasta que desaparezcan las manchas y se neutralicen los malos olores.
En cuanto al uso correcto del aire acondicionado, es importante evitar cambios bruscos de temperatura entre el interior y el exterior. Esto ayuda a no sobrecargar la potencia del equipo y, por ende, reduce el gasto de energía, lo que puede traducirse en un ahorro significativo en la factura de electricidad.