Para nadie es un secreto que el cable Ethernet es el encargado de mejorar la conexión a internet entre los computadores y el router, aparato encargado de proporcionar la señal. La razón se debe a la poca interrupción que hay en la red y los cortes que sí pasan en la señal WiFi.
Sin embargo, pocas personas conocen la posibilidad de conectar dicho aparato al dispositivo móvil. No obstante, se debe tener claro que no se trata de una conexión diseñada específicamente para los celulares.
Para conseguirlo se necesita de un adaptador; motivo por el cual solo será necesario vincular un extremo al router y el otro lado al mismo smartphone, que de acuerdo con el portal La República de Perú, se debe realizar a través de un cable con un puerto USB y la entrada tipo C.
Una vez hecho la conexión, los usuarios podrán sacar provecho de la velocidad del internet proporcionada por la operadora contratada, sin tener que realizar tantos cambios en el módem, como también se le conoce.
Si la intención es mover el router, este debe ubicarse en un lugar estratégico de la casa, con el objetivo de no estar colocando un repetidor o realizar otra maniobra para mejorar la señal.
En la actualidad, varios expertos aseguran que el módem tiene que estar ubicado en la parte central del recinto, debido a que se evita que ciertas zonas alejadas se queden sin señal.
Si el hogar cuenta con dos o tres pisos, el router no se debe colocar en el primer piso; lo mejor será ubicarlo en la parte más alta de la casa. En caso de que sea un solo piso, se debe ubicar sobre un estante.
Ahora bien, el portal Computer Hoy indica que un error constante de las personas a la hora de ubicar el router en el hogar, es que lo hacen cerca de otros aparatos que pueden causar interferencias. Por tal razón, no se debe colocar cerca a un horno microondas, lavadora, refrigerador, entre otros electrodomésticos.
Tampoco deben estar presentes hormigones, barras de fierro, entre otros productos. La señal también se verá afectada si se pone el aparato en habitaciones cerradas o sótano.
También se debe tener presente el funcionamiento y la antigüedad del router. La mayoría de usuarios confían en que el módem que ofrecen las diferentes operadoras son nuevos y sin ningún fallo; sin embargo, pueden existir casos que ofrezcan modelos antiguos o incluso módems que estuvieron estropeados y que fueron reparados. Por tales motivos, la conexión WiFi puede estar presentando fallos.
La mejor opción para evitarlo, es consultando la versión del router y, en caso de determinar que es un modelo viejo, lo mejor será comunicarse con la operadora.
Ahora bien, para averiguar dicho dato, se puede hacer a través de alguna pegatina o etiqueta que esté adherida en el mismo aparato. Asimismo, se puede encontrar la referencia en la caja de instrucciones o buscarlo en la página web del fabricante.
Una vez consultado el dato, el portal Computer Hoy asegura que se debe tener consciencia si sale la versión 802.11a/b/g, debido a que es extremadamente antiguo.
En caso de que aparezca 802.11a/b/g/n, significa que también es un router viejo, pero puede ser medianamente confiable. Sin embargo, este tipo routers solo admiten una banda de frecuencia única que es algo más lenta.
En cuanto a la versión 802.11ac, esta todavía está dentro de su ciclo de vida útil, razón por la cual no debería existir una preocupación, al menos por un corto plazo.
Finalmente, si las personas cuentan con una versión 802.11ax, significa que cuentan con un router nuevo, el cual inició su comercialización en 2020. La versión WiFi 6E es la más nueva del mercado y que pretende estar por muchos en él.