Desde hace varios meses que el multimillonario sudafricano Elon Musk ha estado trabajando, a través de SpaceX, en el lanzamiento de cohetes al espacio exterior para poner en órbita satélites que permitan instalar una red de internet mucho más rápida que la que existe actualmente.

Este fin de semana, el segundo hombre más rico del mundo confirmó que el próximo mes se lanzará dicha red. En su cuenta de Twitter, respondió a la pregunta de cuándo se lanzará e indicó que será “el próximo mes”.

Hasta el momento, este proyecto viene funcionando en fase beta, con la cual se han hecho diferentes pruebas en América del Norte, algunas zonas de Europa y a Chile, Australia y Nueva Zelanda; aunque el plan incluye expandir, por el momento, la red a México y Japón, pero tampoco se descarta que entren en funcionamiento Filipinas y Sudáfrica, en donde SpaceX abrió subsidiarias recientemente.

Los expertos en la materia dudan de que el proyecto cumpla con las fechas de Musk, debido a que la mayoría de sus programas han sufrido retrasos, debido a dificultades técnicas; no obstante, el fundador de Tesla advirtió que para poder iniciar la operación global de la red era necesario tener en órbita unos 1.800 satélites y en este momento hay unos 1.791, por lo que es bastante probable que se pueda alcanzar dicho objetivo.

En los primeros meses del presente año, la compañía tecnológica lanzó cientos de nuevos satélites que buscan ofrecer acceso a Internet desde el espacio, especialmente en territorios rurales en los que la conexión de fibra o cable no ha llegado o llega de manera insuficiente, por lo que el objetivo es que logre una cobertura global significativa a finales de 2021.

Los enlaces láser alivian las limitaciones de las estaciones terrestres, por lo que los datos pueden ir desde, por ejemplo, Sídney a Londres a través del espacio, lo que es, aproximadamente, un 40 % más rápido que la velocidad de la luz en la fibra óptica y un camino más corto”, escribió Elon Musk, en su cuenta de Twitter.

“Además, no hay necesidad de estaciones terrestres por todas partes. ¡El Ártico tendrá un ancho de banda genial!”, tuiteó el multimillonario en su momento.

De igual manera, hace un par de semanas había manifestado que “la velocidad se duplicará a 300 Mbps y la latencia bajará a 20 milisegundos a finales de este año”, mencionó el multimillonario empresario, quien además explicó que la cobertura global del proyecto se logrará en el año 2022.

“La mayor parte de la Tierra para fin de este año (2021), todo para el próximo año; se trata de densificar la cobertura. Es importante anotar que los celulares siempre tendrán la ventaja en áreas urbanas densas. Los satélites son mejores para áreas de densidad de población baja a media”, manifestó Musk a través de su cuenta de Twitter.

Hasta el momento, se conoce que los usuarios en tierra podrán conectarse a la red a través del uso de una pequeña terminal que no es más grande que una computadora portátil.

El kit de instalación para poner en marcha la beta pública del programa requiere de un terminal de usuario, un ‘router’ wifi y una antena que permita conectarse a la red de satélites. Se estima que el costo del servicio es de US$99, mientras que el kit de instalación ronda los US$499.

Elon Musk, quien también lidera otras reconocidas compañías como Tesla Motors y Solar City, ha estimado que el servicio de Starlink podría generar hasta US$30.000 millones al año.

Luego del lanzamiento de más satélites, se prevé que se logre próximamente una megaconstelación integrada por miles de satélites, ubicados cerca del planeta en una región del espacio llamada órbita terrestre baja.