El amarilleo de las luces de un vehículo es un problema común que afecta no solo la apariencia estética del carro, sino también la seguridad vial, ya que puede reducir la eficacia de las luces y la visibilidad durante la conducción. Afortunadamente, existen varias técnicas y productos que permiten restaurar la claridad de las luces del automóvil y eliminar ese molesto tinte amarillo.
¿Por qué las luces del carro se vuelven amarillas?
Antes de abordar la solución al amarilleo de las luces, es importante comprender por qué ocurre este fenómeno. Las principales razones detrás del amarilleo de las luces del automóvil son:
- Exposición a los elementos: la exposición continua a los rayos ultravioleta del sol, así como a la lluvia, la nieve, el viento y otros elementos climáticos, puede causar daño en la superficie de las luces del automóvil con el tiempo.
- Desgaste del policarbonato: la mayoría de las luces de los vehículos modernos están hechas de policarbonato o plástico transparente, que con el tiempo puede deteriorarse y volverse opaco debido a la oxidación y la abrasión.
- Acumulación de suciedad y residuos: la acumulación de suciedad, insectos aplastados, residuos de aceite y otros contaminantes en la superficie de las luces del carro puede contribuir al amarilleo.
- Calentamiento: la temperatura de las luces cuando están encendidas puede contribuir al amarilleo si las luces no están bien ventiladas.
Pasos para eliminar el amarilleo de las luces del carro
1. Reunir los materiales y herramientas necesarios
- Agua tibia y jabón
- Trapos o toallas de microfibra
- Cinta adhesiva para proteger el área circundante
- Lijas de agua de grano 1000, 1500 y 2000
- Pulidor de plástico para faros
- Sellador UV (recomendado)
2. Limpiar las luces
Lavar las luces del carro con agua tibia y jabón para eliminar la suciedad superficial y los residuos. Secarlas con toallas de microfibra limpias.
3. Proteger el área circundante
Utilizar cinta adhesiva para proteger el área circundante de las luces, como la pintura del automóvil, para evitar daños accidentales durante el proceso de restauración.
4. Lijado suave
Comenzar con la lija de agua de grano 1000. Remojar la lija en agua y luego lijar suavemente la superficie de las luces del carro en movimientos circulares durante unos minutos. Esto ayudará a eliminar la capa exterior dañada.
5. Lijado más fino
Seguir con la lija de agua de grano 1500 y luego con la de grano 2000. Cada vez, lijar suavemente en movimientos circulares. A medida que se avance, se notará que la superficie de las luces se vuelve más suave.
6. Pulido
Aplicar el pulidor de plástico para faros en un trapo de microfibra limpio y seco. Luego, frotar el pulidor en movimientos circulares sobre la superficie de las luces. El pulidor ayudará a dar brillo y restaurar la claridad de las luces. Realizar este paso hasta que estar satisfecho con el resultado.
7. Limpieza final
Lavar las luces nuevamente con agua tibia y jabón para eliminar cualquier residuo de pulidor. Secarlas con toallas de microfibra limpias.
8. Aplicación del sellador UV (opcional)
Para prolongar la durabilidad de la restauración y prevenir futuros daños por rayos UV, es recomendable aplicar un sellador UV específico para faros. Seguir las instrucciones del producto para aplicarlo correctamente.
Es importante tener en cuenta que la restauración de faros puede ser un proceso intensivo, y en algunos casos, puede ser necesario repetir el procedimiento después de un tiempo, dependiendo de las condiciones climáticas y de uso.