Una de las aplicaciones más populares y usadas a nivel mundial es la de mensajería instantánea WhatsApp, gracias a su versatilidad y facilidad de uso para intercambiar mensajes y contenido con amigos y familiares. Con el paso de los años, su reconocimiento la han convertido también en una herramienta ideal para el trabajo, especialmente para comunicaciones ágiles.
Ante los cambios y el uso constante con el intercambio de información personal que incluye fotos, videos, documentos y otros archivos. Sin embargo, lamentablemente, los usuarios se han convertido en blanco de los ciberdelincuentes, quienes ven en WhatsApp una oportunidad para engañar, estafar y robar los datos de las nuevas víctimas sin mayor esfuerzo.
Recientemente, ha surgido una alerta significativa en torno a llamadas y mensajes recibidos por parte de WhatsApp que provienen del prefijo +234, correspondiente a Nigeria. Esta advertencia no es una simple precaución, sino una necesidad urgente para que los usuarios se protejan ante una amenaza real y creciente.
El prefijo +234 se ha convertido en un símbolo de alerta debido a una ola de actividades fraudulentas que se originan desde este código de área. Los delincuentes utilizan diversos métodos para engañar a sus víctimas, y uno de los más comunes es el de las llamadas de wangiri. Este término japonés, que significa “un solo timbrazo”, describe una técnica en la que los estafadores llaman a sus objetivos y cuelgan, esperando que la víctima devuelva la llamada.
El problema radica en la devolución de la llamada por parte de la víctima, ya que simplemente responder la llamada puede exponer al usuario a vulnerabilidades, como la clonación del número de teléfono o el acceso a información personal almacenada en el dispositivo.
Adicionalmente, la víctima se puede ver expuesta a que los ciberdelincuentes utilicen esta plataforma popular para realizar solicitudes de dinero hasta la propagación de malware. Un método particularmente insidioso es el envío de enlaces maliciosos que, al ser clicados, instalan software espía en el dispositivo de la víctima.
Estos enlaces pueden parecer inofensivos o incluso atractivos, disfrazados como ofertas promocionales, premios inesperados o mensajes de emergencia. Pero una vez que el software espía está instalado, los delincuentes pueden obtener acceso a datos sensibles, incluidas contraseñas, información bancaria y conversaciones privadas. Esto no solo compromete la privacidad de la víctima, sino que también puede llevar a pérdidas financieras y robo de identidad.
¿Cómo evitar caer en estafas por WhatsApp?
Expertos en ciberseguridad advierten que es fundamental adoptar las siguientes medidas para no ser víctima de los estafadores:
- Nunca descargar aplicaciones u otro programa que sea sugerido por extraños o desconocidos.
- Jamás entregar información personal por chat.
- Cuando llegue a WhatsApp un mensaje ofreciendo regalos, bonos, descuentos especiales o un gran beneficio, se recomienda copiar el texto de Google para descubrir si se trata de una estafa.
- En caso de que sea un mensaje enviado por banco, es vital ponerse en contacto con esa entidad financiera para verificar la información.
- Si el mensaje es enviado por una marca o entidad conocida se debe corroborar si la cuenta está verificada, para ello solo hay que tocar la foto de perfil y revisar si el número está acompañado por un ícono de verificación.
- Bloquear y reportar un chat que sea sospechoso.