Hoy en día, los dispositivos tecnológicos son fundamentales en la vida cotidiana de las personas, ya que proporcionan comunicación estable, entretenimiento, acceso a la información, entre otras funciones esenciales. Uno de estos dispositivos es el teléfono móvil, que permite a los usuarios mantenerse conectados gracias a las aplicaciones de mensajería, redes sociales y correo electrónico. Estas herramientas facilitan la interacción con familiares, amigos y colegas en cualquier momento y desde cualquier lugar
Esto implica que el teléfono móvil ha transformado no solo el ámbito personal, sino también el profesional, porque muchos trabajos requieren el uso de estos dispositivos para gestionar correos electrónicos, coordinar reuniones o realizar tareas específicas. De hecho, el teletrabajo y la flexibilidad laboral han sido posibles en gran medida gracias a la conectividad que brindan los teléfonos móviles.
Sin embargo, el uso excesivo del celular puede ser abrumador y plantear ciertos desafíos para la salud. Por esta razón, muchas personas optan por silenciar el dispositivo, puesto que el constante bombardeo de estímulos digitales puede resultar molesto e incómodo. Así, cada vez más personas recurren al “modo silencio” o “no molestar”, pero ¿qué implica realmente mantener el teléfono en silencio de manera constante?
Los expertos advierten que la dependencia de estos dispositivos puede ocasionar problemas de salud, como agotamiento visual y disminución de la concentración. Además, el uso constante de redes sociales puede afectar la salud mental, fomentando comparaciones y perjudicando la autoestima.
¿Qué significa tener el celular siempre en silencio?
En una conversación con SEMANA, Tatiana Mogollón Carrillo, psicóloga y docente del programa de Psicología en Continental University of Florida, explicó que mantener el celular siempre en silencio es una manera de desconectarse de los espacios digitales, con el fin de encontrar tranquilidad y recuperar el control sobre el entorno, reduciendo las distracciones.
“La modalidad de silencio promueve la concentración y el bienestar mental, ya que evita la sobrecarga de información, la cual puede generar ansiedad. Por ello, es importante combinar el uso del modo silencioso con actividades que requieran atención plena, como leer o meditar”, afirmó la especialista.
En este contexto, también destacó la importancia de establecer límites diarios en el uso del teléfono móvil para prevenir problemas de salud derivados del uso excesivo, los cuales pueden afectar significativamente las actividades cotidianas, el rendimiento laboral y las relaciones personales.
“El uso prolongado del celular puede causar tanto problemas físicos como psicológicos. Entre los efectos físicos se incluyen la fatiga visual, problemas musculoesqueléticos como dolores en cuello, hombros y muñecas, e incluso el síndrome del túnel carpiano. En cuanto a la salud mental, es crucial considerar los trastornos del sueño, como el insomnio, que disminuyen la calidad del descanso, así como los estados de depresión y ansiedad, que pueden conducir al aislamiento social”, añadió Mogollón Carrillo.
Por esta razón, los expertos en psicología subrayan la importancia de utilizar el celular de manera responsable. Como se mencionó anteriormente, la luz emitida por las pantallas interfiere con la producción de melatonina, afectando la calidad del sueño y el funcionamiento cognitivo, lo que altera los procesos de memoria, atención y concentración.
“El uso indiscriminado de los dispositivos móviles puede activar el sistema de recompensa del cerebro, liberando dopamina, lo que puede llevar a comportamientos adictivos, ya que el cerebro busca repetir esas experiencias placenteras”, concluyó la psicóloga.