Este miércoles (1 de diciembre) se conoció que Meta, la empresa matriz de Facebook, desmanteló redes maliciosas que utilizaban discusiones sobre vacunas para acosar a profesionales o sembrar divisiones en la sociedad sobre este tema, una señal de que la desinformación relacionada con la pandemia, propagada con fines políticos, continúa fluyendo.
“Insultaron a médicos, periodistas y legisladores, calificándolos de partidarios de los nazis porque promovían vacunas contra la covid-19 y asegurando que la vacunación obligatoria conduciría a una dictadura sanitaria”, explicó en conferencia de prensa Mike Dvilyanski, director de investigaciones sobre amenazas emergentes de Facebook.
Dvilyanski se refería a una red vinculada al movimiento antivacunas denominada “V_V”, a la que la compañía californiana acusó de realizar una campaña de intimidación y acoso masivo contra figuras destacadas de la salud, medios de comunicación y políticos en Italia y Francia.
Los autores de esta operación se coordinaban, en particular, a través del sistema de mensajería Telegram, donde los voluntarios tenían acceso a listas de personas objetivo y a un “entrenamiento” para escapar de la detección automática por parte de Facebook.
Sus tácticas incluían dejar comentarios bajo los mensajes de las víctimas en lugar de publicar contenido, y usar grafías ligeramente modificadas como “vaxcinati” en lugar de “vaccinati”, que significa “personas vacunadas” en italiano.
Impacto de la campaña
El gigante de las redes sociales reconoció que era difícil evaluar el impacto de la campaña, que se llevó a cabo en diferentes plataformas.
Se trata de una “guerra psicológica” contra quienes están a favor de las vacunas, señaló Graphika, empresa especializada en el análisis de redes sociales que publicó este miércoles un reportaje sobre el movimiento “V_V”, cuyo nombre proviene del verbo italiano “vivere” (“vivir”).
“Hemos observado lo que parece ser un movimiento populista tentacular que combina teorías conspirativas con narrativas antiautoritarias y un torrente de desinformación sanitaria”, detallaron expertos de Graphica.
Según calculan, “V_V” cuenta con unos 20.000 simpatizantes, algunos de los cuales han participado en actos vandálicos contra hospitales y han interferido en el programas de vacunación, por ejemplo, concertando citas médicas sin acudir.
Desde el comienzo de la pandemia, la desinformación sobre la situación sanitaria ha adoptado diversas formas, desde consejos de salud falsos hasta curas milagrosas, teorías conspirativas o estafas en línea.
Esta información falsa también está muy extendida con fines políticos. Ya en junio de 2020, en un plan presentado por el jefe de la diplomacia europea, la UE llamó a las plataformas digitales a reaccionar y denunció las campañas de “terceros países, en particular Rusia y China”, que “buscan socavar el debate democrático y exacerbar la polarización de la sociedad”.
Los espejos
En marzo, Estados Unidos acusó a Rusia de realizar operaciones de desinformación en línea. Meta también dijo que desmanteló otra operación orquestada desde China, que utilizaba cuentas falsas.
Los promotores de esa campaña amplificaban mensajes publicados en el perfil de un biólogo suizo inventado según el cual Estados Unidos estaba presionando a la Organización Mundial de la Salud para que culpara a China por el coronavirus.
Medios estatales chinos luego citaron a este falso biólogo. “Era como una galería de espejos, que reflejan sin cesar una sola personalidad falsa”, describió Meta en un comunicado.
El grupo californiano encontró vínculos entre esta operación y empleados de la empresa china de ciberseguridad Sichuan Silence Information Technology Co., así como personas asociadas con otras empresas chinas especializadas en infraestructura en todo el mundo.
“Esta es la primera vez que observamos una operación que incluye un grupo coordinado de empleados estatales para actuar como caja de resonancia de esta manera”, indicó.
“Pero la verdad emergió rápidamente y estalló”, dijo Nathaniel Gleicher, director de regulaciones de seguridad de Facebook.
*Con información de AFP