El gigante tecnológico: Google, fue condenado por un tribunal australiano, el cual tomó este viernes una decisión que ha sido considerada como un fallo histórico.
Según destaca la agencia de noticias AFP, Google habría engañado a los consumidores, en relación con la recopilación de datos de localización a través de dispositivos móviles con sistema Android.
La Comisión Australiana de la Competencia y el Consumidor (ACCC) mencionó la decisión contra el gigante tecnológico, como “pionera en el mundo”.
La legislación australiana en materia de consumo es clara, según el tribunal federal. Recopilar el historial de ubicaciones de usuarios no está permitido. Más aún, si las personas habían optado por no compartir esa información.
En consecuencia, Google violó la legislación australiana en materia de consumo, señaló AFP.
El argumento que hace el Tribunal es que la compañía tecnológica “no dejó claro a los usuarios que permitir en su teléfono el seguimiento de la actividad en internet y de las aplicaciones, también significaba dar permiso para conservar datos de localización”.
Este tipo de datos pueden ser muy valiosos para los anunciantes que intentan ofrecer productos y servicios relacionados con la localización.
Para el presidente de la ACCC, Rod Sims, “se trata de una importante victoria para los consumidores, especialmente para los que se preocupan por su privacidad en internet, y la decisión del tribunal envía un mensaje contundente a Google y a otras empresas de que las grandes compañías no deben engañar a sus clientes”.
La Comisión indicó que, tras la sentencia, pedirá “sanciones pecuniarias” y otras medidas que deberán determinarse más adelante, a través de los respectivos trámites jurídicos del caso.
En respuesta, Google protestó contra la sentencia y señaló que el tribunal había rechazado otras alegaciones más generales de la ACCC y que solo se refería a una clase de usuarios muy definida.
Otras demandas
Además del caso que motivó este viernes el fallo en Australia, Google está siendo demandado por diez estados de EE. UU., los cuales creen que estaría violando las leyes antimonopolio.
Según han registrado los medios estadounidenses, los estados dicen que el gigante tecnológico tiene un monopolio injusto en Internet.
Las demandas provienen de fiscales estatales de EE.UU., quienes sostienen que habría supuestas prácticas contra la competencia. Los anuncios en línea, su comercialización y las tecnologías que usa el gigante de Internet para dominar el mercado son los que están en la mira de la justicia.
En medios estadounidenses, el fiscal general de Texas dijo: “Si el mercado libre fuera un juego de béisbol, Google se habría posicionado como el lanzador, el bateador y el árbitro”. Las pesquisas al respecto continúan.