El equipo de científicos que opera el telescopio Espacial Hubble de la Nasa ha entregado nueva información sobre un importante hallazgo que fue realizado gracias a la observación del espacio exterior.

La información sobre este descubrimiento fue compartida por la Agencia Espacial de Europa (ESA), entidad que indicó que se habría detectado un fenómeno que se está produciendo desde hace más de tres décadas en el cosmos.

Los astrónomos indican que ha confirmado la existencia de un la presencia de un “monstruo cósmico” ubicado a años luz de la Tierra y cuyo tamaño se hace cada vez más grande a medida que pasa el tiempo.

De qué se trata el nuevo hallazgo del Telescopio Hubble

Según establece el comunicado emitido por la ESA, la cual utiliza el Hubble junto a la Nasa, se detectó un “monstruo en ciernes” (a 8000 millones de años luz de la Tierra) compuesto por dos cúmulos de galaxias elípticas en proceso de fusión.

Las imágenes captadas por el telescopio exponen un cúmulo de galaxias masivo que se presenta como una multitud de formas densas y ovaladas. En donde galaxia aparece rodeada por un halo brillante de color naranja que está en torno a su núcleo.

La imagen muestra un cúmulo de galaxias que fueron captadas por el telescopio Hubble. | Foto: Agencia Espacial Europea

Como un monstruo marino sumergido que causa olas en la superficie, este cúmulo de galaxias puede identificarse por las distorsiones en el espacio-tiempo a su alrededor que capta el telescopio Hubble.

La enorme masa de este leviatán cósmico curva el espacio-tiempo, creando una lente gravitatoria que desvía la luz de galaxias distantes más allá del cúmulo. Las rayas retorcidas y los arcos de luz que vemos en esta imagen son el resultado. Una multitud de otras galaxias rodea el cúmulo, y un puñado de estrellas en primer plano con picos de difracción reveladores se encuentran dispersos por toda la imagen, explica la ESA en un comunicado.

Este cúmulo de galaxias en particular, llamado eMACS J1823.1+7822, se encuentra a casi 9.000 millones de años luz de distancia en la constelación de Draco. Es uno de los cinco cúmulos de galaxias excepcionalmente masivos que Hubble exploró con el objetivo de medir la fuerza de estas lentes gravitacionales, lo que proporcionaría información sobre la distribución de la materia oscura en los cúmulos de galaxias.

Ilustración creada por una IA de cómo se vería una galaxia energética. | Foto: Bing Image Creator

Lentes gravitacionales fuertes como eMACS J1823.1+7822 pueden ayudar a los astrónomos a estudiar galaxias distantes al actuar como grandes telescopios naturales que magnifican objetos que de otro modo serían demasiado débiles o distantes para resolver.

Esta imagen de longitud de onda múltiple superpone datos de ocho filtros diferentes y dos instrumentos diferentes: la Cámara avanzada para sondeos del Hubble y la Cámara de campo amplio 3.

Ambos instrumentos pueden ver objetos astronómicos en solo una pequeña porción del espectro electromagnético utilizando filtros, que permiten a los astrónomos obtener imágenes de objetos en longitudes de onda seleccionadas con precisión. La combinación de observaciones en diferentes longitudes de onda permite a los astrónomos desarrollar una imagen más completa de la estructura, composición y comportamiento de un objeto que la que revelaría la luz visible por sí sola.

Hubble captura una galaxia irregular ondulante

La galaxia NGC 7292 ondea a través de esta imagen del Telescopio Espacial Hubble, acompañada por un puñado de estrellas brillantes y manchas indistintas de galaxias extremadamente distantes en el fondo.

Ilustración sobre la formación de nuevas galaxias. | Foto: Bing Image Creator

A unos 44 millones de años luz de la Tierra en la constelación de Pegaso, esta galaxia es irregular, lo que significa que carece de los distintos brazos espirales o la forma elíptica de algunas galaxias.

Inusualmente, su núcleo se estira en una barra distinta, una característica que se ve en muchas galaxias espirales. Además de su forma nebulosa, NGC 7292 es notablemente débil. Como resultado, los astrónomos clasifican a NGC 7292 como una galaxia de bajo brillo superficial, apenas distinguible contra el fondo del cielo nocturno. Tales galaxias suelen estar dominadas por gas y materia oscura en lugar de estrellas, informa la NASA.

Los astrónomos ordenaron al Hubble que inspeccionara NGC 7292 durante una campaña de observación que analizó las secuelas de las supernovas de Tipo II para aprender más sobre su diversidad. Estas explosiones colosales ocurren cuando una estrella masiva colapsa y luego rebota violentamente en una explosión catastrófica que destroza la estrella.

Los astrónomos observaron la supernova de NGC 7292 en 1964 y la llamaron SN 1964H. Estudiar la vecindad estelar de SN 1964H ayuda a los astrónomos a estimar la masa inicial de la estrella que se convirtió en supernova. Las observaciones podrían ayudar a descubrir compañeros estelares sobrevivientes que alguna vez compartieron un sistema con la estrella que se convirtió en SN 1964H.

Con información de Europa Press