En los últimos meses, toda persona interesada en la inteligencia artificial (IA) tiene la oportunidad de interactuar con diferentes plataformas digitales que son capaces de ofrecer diferentes servicios, gracias a que están impulsadas por esta tecnología.
Un ejemplo claro es el chatbot de ChatGPT, el cual cuenta con la facultad de resolver diferentes preguntas, resolver complejas operaciones matemáticas y hasta ofrecer consejos sobre educación financiera, turismo y hasta en temas románticos. Por otra parte, existen plataformas como Midjourney o Bing Image Creator que permiten generar ilustraciones altamente realistas con base en las descripciones textuales de un usuario.
Por tal motivo, una IA ha imaginado cómo sería el mundo sin hombres. El software fue creado por un estudiante de la Universidad de Georgia, y utiliza una técnica llamada ‘Red generativa Antagónica’, la cual crea dos redes neuronales que compiten entre ellas mismas para producir nuevas imágenes.
En esta oportunidad, el programa utilizó un conjunto de datos de fotos de diferentes ciudades para crear imágenes nuevas que eliminan la presencia del hombre.
El resultado dejó un compilado de imágenes que muestran diferentes lugares y paisajes con bastantes cambios. Por ejemplo, las calles y los edificios se ven más vacíos. También hay cambios sustanciales en la distribución de la población y la forma de interactuar en las personas.
El experimento despertó interés en la comunidad científica. No obstante, generó críticas, debido a que muchos consideraron que la eliminación de los hombres podría perpetuar los prejuicios de género.
Los críticos también aseguran que esto puede llevar a la discriminación, como la raza, religión y la clase social. Ante los reparos, los creadores del software han explicado que su intención no es dar una posición política o social, sino demostrar toda la capacidad que tiene la inteligencia artificial.
Por otra parte, un grupo de personas decidió ejecutar un experimento empleando la inteligencia artificial presente en las plataformas generadoras de imágenes, para así intentar obtener una representación de lo que sería la “belleza ideal” en hombres y mujeres.
Para lograr este objetivo se recurrió a herramientas como Midjourney, DALL-E 2, Stable Diffusion como un medio para poder tener una amplia variedad de imágenes que expongan la interpretación de las inteligencias artificiales, la apariencia “perfecta” que deberían tener los seres humanos.
La apuesta era determinar si las IA coincidirían en generar ilustraciones en donde se aprecien hombres y mujeres con una piel impecable, sin arrugas, nariz perfecta, labios voluminosos y rasgos bien definidos.
Los responsables del experimento decidieron generar las imágenes tomando como referente una serie de fotografías disponibles en internet, seleccionadas con base en diferentes criterios, para que la IA pudiera generar ilustraciones basadas en dichas fotos.
Posteriormente, se observó que cerca del 40 % de las imágenes generadas por la IA exponían mujeres, eran rubias, mientras que el 30 % poseían ojos marrones y en más de la mitad de las ilustraciones lucían una piel bronceada. En el caso de los hombres, cerca del 70 % de las ilustraciones presentaban a hombres con cabello castaño y el 23 % tenían ojos marrones.
Así las cosas, para la inteligencia artificial la mujer perfecta debe ser rubia, delgada y tener una piel perfectamente bronceada, mientras que el hombre debe tener ojos color marrón, figura atlética y cabello castaño.
Con base en las imágenes producidas por la IA, los autores del estudio consideraron que hubo un sesgo en el color de piel de las personas, considerando que los dibujos de personas de raza negra casi no aparecieron en las ilustraciones. Además, identificaron que la inteligencia artificial tiene una percepción de “cuerpo perfecto” poco realista, puesto que presentó hombres y mujeres con figuras poco realistas y con una sexualización excesiva en el busto y cola de las mujeres.
De manera que esta iniciativa terminó evidenciando los falsos imaginarios que existen en torno a la belleza física, los cuales en algunos casos son divulgados como estándares estéticos en las redes sociales por sus usuarios más jóvenes.