Las aplicaciones de la inteligencia artificial (IA) parecen no tener límites. El desarrollo de esta tecnología ha permitido que realice desde las tareas más complejas hasta las más sencillas, eso sí, con un alto nivel de detalle.
En paralelo al desarrollo de la IA también está la creatividad de los usuarios, quienes no han dudado en dar asignaciones que podrían figurar en el campo de lo extraño, pero cuyos resultados han sido sorprendentes.
Para esta oportunidad, un fanático de Chespirito se remitió a la Stable Diffusion, una herramienta que permite crear imágenes a partir de la inteligencia artificial. La actividad que desarrolló con la aplicación resultó bastante particular: diseñó una galería en la que ‘don Ramón’, el mítico personaje de El Chavo del 8, encarna a populares protagonistas del mundo de la ciencia ficción.
Las imágenes no tardaron en llegar a varias plataformas digitales, por lo que se hicieron virales de inmediato. Algunas de las más llamativas muestran al popular ‘Monchito’ con el traje de Superman, con la apariencia de un hobbit salido de El Señor de los Anillos y como si fuera el protagonista de la icónica película de acción Mad Max.
Las imágenes creadas con IA han sorprendido al mundo con su impresionante realismo. De hecho, hace unas semanas, se hicieron virales imágenes en las que se veía al papa Francisco con un supuesto cambio de look. Las fotografías le dieron la vuelta al mundo y lograron confundir a más de uno, sin embargo, se trató de un simple montaje hecho con la ayuda de la Inteligencia Artificial.
¿Inteligencia artificial sepultará a la fotografía?
Año tras año se realizan diferentes concursos de fotografía que buscan premiar la destreza de los profesionales y algunos aficionados a la hora de captar las mejores imágenes con sus lentes.
Uno de estos es el Sony World Photography Awards, cuya versión de este año tuvo un hecho bastante curioso y polémico, que lo hizo víctima de la tecnología.
El fotógrafo Boris Eldagsen participó con una fotografía llamada The Electrician, con la cual se alzó como el ganador del prestigioso concurso en la categoría de Creatividad. Para sorpresa de todos, y más de los jurados que le otorgaron el primer puesto, el vencedor confesó que la imagen que lo llevó a la victoria había sido creada con inteligencia artificial.
El profesional, que desde hace más de 30 años ejerce como fotógrafo, ha dedicado sus últimos dos años a involucrarse con todo lo que tiene que ver con esta poderosa tecnología; en medio de este camino creó una colección llamada Pseudomnesia, alimentada con imágenes generadas con esta herramienta y de la cual hace parte The Electrician.
El profesional renunció a la remuneración de 5.000 dólares y a la equipación que otorgaba Sony al ganador; así mismo, explicó que su intención de participar con esta imagen no era otra que la de averiguar si en este tipo de certámenes, las fotografías creadas con inteligencia artificial eran capaces de avanzar y ganar.
“[Quise] averiguar si los premios fotográficos están preparados para que se presenten imágenes sintéticas. No lo están”, indicó Eldagsen.
“Nosotros, el mundo de la fotografía, necesitamos un debate abierto. Una discusión sobre lo que queremos considerar fotografía y lo que no. ¿Es el paraguas de la fotografía lo suficientemente grande como para invitar a participar a imágenes de IA, o sería un error?”, dijo el profesional alemán, quien invitó a regular esta tecnología y a debatir con juicio los alcances de estas herramientas y las afectaciones que podrían traer para el ejercicio de su profesión.
Luego de lo sucedido, el fotógrafo llamó la atención sobre el papel de los jurados, quienes pese a su experiencia no pudieron darse cuenta de que esta imagen había sido creada con IA y, al parecer, obviaron detalles como las manos, uno de los aspectos en los que estas herramientas aún presentan fallas
“Igual que la fotografía sustituyó a la pintura en la reproducción de la realidad, la IA sustituirá a la fotografía. No tengas miedo del futuro. Solo será más obvio que nuestra mente siempre creó el mundo que la hace sufrir”, fue la reflexión que dejó el alemán que provocó todo este debate.