La inseguridad es la sensación o percepción de falta de protección y de estabilidad en distintos aspectos de la vida. Cuando se habla puntualmente de la inseguridad personal, los expertos apuntan a la falta de confianza en sí mismo, que puede influir en cómo se toman decisiones o se enfrentan los desafíos de la vida.
De acuerdo con la inteligencia artificial Chat GPT, las personas que son inseguras suelen usar ciertas palabras o expresiones que reflejan precisamente su falta de confianza. Estas, al parecer, se repiten con frecuencia.
Estas son cinco expresiones destacadas por esta herramienta:
“Creo que...” o “Pienso que...”: Estas frases introducen una duda o falta de seguridad en lo que se está diciendo, como si quisieran suavizar su afirmación.
“Perdón”: Usar “perdón” en exceso, incluso cuando no hay razón para disculparse, es común en personas que buscan evitar conflictos o complacer a los demás.
“¿Sabes?”: Al final de una frase, esta expresión puede mostrar necesidad de validación o búsqueda de aprobación para lo que se acaba de decir.
“Sólo...”: Este término minimiza lo que la persona dice, como si estuviera justificando que no quiere pedir demasiado o incomodar.
“No sé...”: Usado al principio o al final de una oración, esta expresión indica falta de seguridad en la propia opinión o en lo que se está comunicando.
Estas palabras no son necesariamente negativas, pero cuando se usan en exceso, pueden reflejar inseguridad.
Características de las personas inseguras
Las personas inseguras suelen presentar una serie de características que reflejan su falta de confianza en sí mismas y en sus habilidades. Estas son algunas de las más comunes:
Necesidad de aprobación: Buscan constantemente la validación de los demás, ya que dependen de la opinión externa para sentirse bien consigo mismas. Les cuesta tomar decisiones sin la aprobación de alguien.
Evitan tomar riesgos: Prefieren quedarse en su zona de confort y evitan situaciones nuevas o desafiantes por miedo a fracasar o hacer el ridículo. La inseguridad hace que el cambio o los retos les resulten incómodos.
Dificultad para expresar opiniones: Suelen reprimir lo que piensan o sienten, temiendo ser juzgadas o rechazadas. Esto puede llevarlas a aceptar lo que otros dicen, aunque no estén de acuerdo, o a ser excesivamente complacientes.
Autocrítica constante: Las personas inseguras tienden a ser muy duras consigo mismas. Subestiman sus logros y se enfocan en sus defectos o en lo que creen que hicieron mal, lo cual alimenta un ciclo de inseguridad.
Comparación con los demás: Tienden a compararse continuamente con otras personas, lo cual refuerza su baja autoestima y les hace sentir que no son suficientes. Este hábito aumenta la inseguridad, ya que se enfocan en sus puntos débiles en lugar de en sus fortalezas.
Dificultad para aceptar cumplidos: Les cuesta reconocer sus logros o recibir elogios, ya que suelen dudar de su propio valor. Pueden restar importancia a los cumplidos o justificarlos, como si no merecieran el reconocimiento.
Miedo al rechazo: Para las personas inseguras, el rechazo es especialmente doloroso. Esto las lleva a evitar ciertas relaciones o situaciones y a preocuparse en exceso por cómo las perciben los demás.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de SEMANA.