Durante su 53º sobrevuelo cercano a Júpiter, el 31 de julio de 2023, la nave espacial Juno de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos (Nasa, por sus siglas en inglés) pasó cerca de la luna volcánica Io y capturó ambos cuerpos en la misma imagen. La imagen fue publicada por la Nasa este miércoles 13 de septiembre.
Para crear esta imagen, el científico ciudadano Alain Mirón Velázquez procesó una imagen en bruto del instrumento JunoCam, mejorando el contraste, el color y la nitidez, según informó la Nasa.
En momento en que se tomó la imagen en bruto fue el 30 de julio de 2023, cuando Juno estaba a unos 51.770 kilómetros de Ío y a unos 395.000 kilómetros por encima de las cimas de las nubes de Júpiter. Por lo que, en las imágenes se logra ver no solo al planeta, sino también a la luna en una sola fotografía.
La superficie de Io, el mundo volcánicamente más activo del sistema solar, está marcada por cientos de volcanes que periódicamente entran en erupción con lava fundida y gases sulfurosos.
Sobre la misión Juno, la Nasa recordó que esta ha proporcionado a los científicos las miradas más cercanas a Io desde 2007, y la nave espacial recopilará imágenes y datos adicionales de su conjunto de instrumentos científicos durante pases aún más cercanos a finales de 2023 y principios de 2024.
Verano septentrional de Saturno
Imágenes del telescopio espacial Webb muestran el final del verano septentrional en Saturno a medida que enormes flujos de aire a escala planetaria cambian de dirección a medida que se acerca el otoño.
Las nuevas observaciones también han proporcionado una última visión del polo norte de Saturno, con su enorme vórtice cálido lleno de gases de hidrocarburos, antes de que el polo comience a retroceder hacia la oscuridad del invierno polar.
Este informe meteorológico interplanetario es gracias a nuevas imágenes analizadas por un equipo liderado por la Universidad de Leicester y publicadas en Journal of Geophysical Research: Planets. Han proporcionado nuevos conocimientos sobre los cambios de estación en el enorme planeta exterior, famoso por sus anillos helados.
Al igual que la Tierra, Saturno tiene una inclinación axial y experimenta las estaciones de la misma manera. Sin embargo, Saturno tarda 30 años en orbitar alrededor del Sol, por lo que las estaciones duran 7,5 años terrestres. El verano del hemisferio norte en ambos mundos está llegando a su fin.
Mientras que la Tierra se dirige al equinoccio de otoño del norte en septiembre, Saturno se dirige al equinoccio de otoño del norte en 2025, lo que significa que los polos norte de ambos planetas se dirigen a períodos prolongados de invierno polar.
El equipo de Leicester utilizó el instrumento MIRI en el telescopio Webb para estudiar la atmósfera de Saturno en luz infrarroja, lo que les permite medir las temperaturas, la abundancia de gases y las nubes desde las agitadas cimas de las nubes hasta las regiones altas de la atmósfera conocidas como estratosfera.
El instrumento MIRI divide la luz infrarroja en las longitudes de onda que la componen, lo que permite a los científicos ver las huellas dactilares de la rica variedad de sustancias químicas dentro de la atmósfera de un planeta.
En la imagen, creada combinando solo algunas de las longitudes de onda observadas por MIRI, se destaca en azul la brillante emisión térmica del polo norte. En el polo norte se puede ver el cálido ciclón polar norte (NPC), de 1.500 km de ancho, observado por primera vez por la misión Cassini. Está rodeado por una región más amplia de gases cálidos llamada vórtice estratosférico del polo norte (NPSV), que se formó en la primavera de Saturno y ha persistido durante todo el verano septentrional.
Con información de Europa Press.