Con la llegada de las nuevas tecnologías y el Internet, los correos electrónicos se han convertido en una herramienta fundamental para la comunicación personal y profesional de las personas. Sin embargo, el mayor de los problemas que afecta a los usuarios es la recepción de mensajes, ya que podría tratarse de ciberdelincuentes, o simplemente no permite que la bandeja de entrada esté organizada.
Lo cierto es que, con el paso de los años, muchos usuarios pueden verse afectados ante la saturación de una avalancha de correos, especialmente de origen promocional que, aunque pueden ofrecer descuentos o información útil en ocasiones, generalmente se convierten en un problema para los usuarios que desean mantener al día su bandeja.
Para aquellos que utilizan Gmail, existen diversas maneras de combatir esta sobrecarga de correos no deseados, que puede ayudar a agrupar automáticamente los correos electrónicos en distintas pestañas, como ‘Principal’, ‘Social’ y ‘Promociones’.
No obstante, hay que tener en cuenta que muchos de estos correos promocionales, newsletters y ofertas, llegan luego de que los usuarios aceptan los términos y condiciones de la empresa, donde muy seguramente está la ‘letra pequeña’ que “autoriza” al envío de los mismos, llenando la capacidad de almacenamiento con contenido, que muy seguramente no es del interés del usuario.
Por ejemplo, la app de correo electrónico dispone de un apartado de Promociones, donde automáticamente filtra los emails con promociones de tiendas, boletines y otros servicios, que detecta la mayoría de estos emails de este tipo. Aunque es útil para mantener estos correos separados, muchos usuarios prefieren deshacerse de ellos por completo.
¿Cómo eliminar los correos con publicidad en Gmail?
Para gestionar mejor esta situación, Gmail permite la creación de filtros personalizados. Para ello, el usuario debe abrir uno de los correos promocionales, hacer clic en los tres puntos de la esquina superior derecha y seleccionar ‘Filtrar mensajes como este’.
En esta ventana, se pueden especificar diferentes criterios, como la dirección de correo electrónico o palabras en el asunto. Luego, es posible decidir qué hacer con esos mensajes, por ejemplo, enviarlos directamente a la papelera o marcarlos como leídos sin siquiera mostrarlos en la bandeja de entrada.
Otra alternativa es cancelar la suscripción a boletines de manera rápida y sencilla. En muchos correos promocionales, Gmail incluye un botón de ‘Cancelar suscripción’ (o también unsubscribe) en la parte superior del mensaje, cerca del nombre del remitente. Esta opción evita que el usuario tenga que buscar el enlace de cancelación en el cuerpo del correo, lo que muchas veces resulta confuso o está deliberadamente escondido.
Al hacer clic en este botón, la cuenta del correo electrónico hace envío de una solicitud automática para eliminar la dirección de correo del usuario de la lista de suscriptores de ese remitente. Este proceso, si bien es rápido, puede tardar unos días en surtir efecto, ya que depende del cumplimiento por parte de la empresa emisora del correo. Es importante destacar que esta opción no garantiza que el remitente deje de enviar correos por completo, pero reduce significativamente la frecuencia con la que llegan.