Muchos usuarios de iPhone consideran que su celular es una herramienta importante –casi indispensable– en su día a día, pues es un equipo que ayuda a organizar tareas, tiene muy buena calidad para tomar fotografías, videos y grabaciones de voz, entre otras.
Pero uno de los factores que más angustia a sus usuarios es la calidad de su batería, pues según el cuidado que se le dé y a los factores a los que se exponga el equipo, puede no tener una óptima condición.
Otra razón por la que los usuarios de Apple muestran una gran preocupación es por la ola de calor que se vive en el mundo, sobre todo en Europa, pues esto hace que la calidad de la batería del celular disminuya en gran forma.
Sin embargo, hay una razón que no muchos conocen que gasta mucha batería y genera calor sin aportar beneficio alguno, la cual es tener el wifi encendido al estar fuera de casa.
Cuando el wifi queda encendido y el usuario sale de casa, el equipo se encuentra permanentemente buscando una red a la que conectarse, pues escanea todas las que detecta, comprueba qué tipo de seguridad usa, y más.
Al final de todo, esta es una acción que el equipo sigue haciendo en segundo plano, no aporta un gran beneficio y sí afecta el rendimiento y la batería del teléfono móvil y puede llegar a dañarlo.
Aunque muchas personas desactivan el wifi desde el centro de control que se despliega de la parte superior del celular deslizándolo con el dedo, esto realmente no se hace, es necesario que la persona ingrese desde el menú/wifi/ y le dé en apagar, para que el wifi quede realmente inactivo.
Tres errores que agotan la batería del iPhone con más velocidad
Según reseña la página de soporte de Apple, la batería del iPhone está hecha con tecnología de iones de litio. En comparación con la tecnología de las baterías de generaciones anteriores, las baterías de iones de litio se cargan más rápido, duran más y tienen una mayor densidad de potencia para proporcionar mayor duración en un empaque más liviano.
El portal Computer Hoy recoge algunas prácticas que podrían ser vistas como algo completamente normal, pero comprometen la autonomía de la batería del iPhone.
Para empezar, la costumbre de cerrar y volver las aplicaciones configura una de las principales razones por las que la batería del iPhone dura menos.
En principio, si una aplicación no se está usando en el momento, lo más sensato sería cerrarla. Sin embargo, en caso de que el usuario incurra en el hábito de abrir y cerrar una aplicación múltiples veces en poco tiempo, provocará un gasto mayor de energía, haciendo que la batería disminuya su carga con mayor rapidez.
Otro error tiene que ver con conservar aplicaciones que no se usen, pero sí consuman batería. Por ejemplo, en algunos casos, los usuarios instalan aplicaciones que dejan de usar durante largos períodos, pero estas continúan operando de una manera pasiva, aunque no se abran.
Finalmente, el citado portal sostiene que las baterías se degradan con el tiempo. En ese orden de ideas, no tendrá la misma autonomía una que ya tenga algunos años encima si se compara con otra completamente nueva.
Por esta razón, se recomienda reemplazar la batería si ya cumplió una cantidad importante de años y su duración se vuelve demasiado corta.