Nintendo ha lanzado una recomendación inesperada pero importante para todos los propietarios de consolas Switch. A través de un comunicado oficial publicado en su cuenta de X (anteriormente Twitter), la compañía japonesa ha querido compartir un aviso sobre los riesgos que enfrentan las consolas y mandos de Nintendo cuando los usuarios tienen mascotas en casa. Lo que parecía un simple consejo sobre el cuidado del dispositivo ha revelado una nueva preocupación: el contacto con la saliva y la orina.

Los riesgos invisibles que acechan la consola

Es común que los usuarios de consolas enfrenten accidentes relacionados con sus dispositivos, como derrames de comida o bebidas. Líquidos como jugos o restos de comida pueden dañar las consolas si no se limpian adecuadamente, pero Nintendo ha destacado un riesgo que muchos no habrían considerado: el contacto de las consolas y mandos con las mascotas.

La nueva recomendación de Nintendo advierte sobre los peligros de las mascotas para la Switch. | Foto: Captura de pantalla tomada de @nintendo_cs.png

En el mensaje publicado por la compañía, se explicó que, en ocasiones, las mascotas se sienten atraídas por los dispositivos y, sin que los usuarios se den cuenta, los convierten en juguetes. La saliva, que queda en los mandos y consolas, y la orina de los animales, pueden causar fallos en el funcionamiento del dispositivo debido a la humedad.

Un usuario compartió su experiencia: “Gracias, amigo. Esto llega 6 años tarde después de que mi perro mordiera mi joystick”, lo que ilustra cómo el contacto accidental con las mascotas puede terminar dañando los dispositivos.

¿Cómo proteger la consola Switch?

Nintendo no solo identificó el problema, sino que también ofreció algunas recomendaciones prácticas para evitar estos accidentes. La clave está en la prevención y en tener cuidado al colocar la consola en lugares accesibles para las mascotas. Mantener el Switch y los Joy-Con alejados de las zonas donde las mascotas suelen moverse y asegurarse de que la consola se encuentre en un lugar seguro, fuera de su alcance.

Otra recomendación se enfoca en la limpieza regular de la consola y los mandos para evitar que la saliva o cualquier otro líquido se acumule en los botones o puertos. En caso de que se produzca un accidente y el dispositivo se moje, es importante secarlo inmediatamente y, si es necesario, llevarlo a un profesional para evitar daños a largo plazo.

Casos reales: Usuarios comparten sus historias

A través de las redes sociales, muchos usuarios han compartido sus propias experiencias relacionadas con las mascotas y los dispositivos de Nintendo. Desde animales masticando los mandos hasta juegos destruidos por la curiosidad de los perros. Uno de los comentarios más frecuentes fue: “¡Entiendo! ¡Se divirtieron quitando las cubiertas de los Joy-Con! … Además, nunca lo coloques en una posición baja en una zona para perros…” Este tipo de incidentes demuestra cómo, a veces, la falta de precaución puede resultar en un daño irreversible para la consola o el juego.

Juegos | Foto: © 2018 SOPA Images

Otro usuario relató: “Me pasó con mi copia de Omega Ruby, mi perro pensó que era un juguete para masticar y perdí todos mis Pokémon y progreso”. Este testimonio destaca cómo la curiosidad de las mascotas puede destruir horas de juego y progreso en una partida.

Recomendaciones finales para cuidar la Nintendo Switch

Para evitar que las mascotas conviertan la consola Switch en un “juguete” accidental, algunas sugerencias adicionales:

  • Colocar el Switch en lugares seguros: Es fundamental guardar la consola en sitios altos o alejados de las mascotas para evitar que se acerquen.
  • Utilizar fundas protectoras: Las fundas no solo protegen el dispositivo de golpes, sino también de la saliva y otros líquidos que puedan acumularse.
  • Limpieza constante: Si se nota que los mandos o la consola están pegajosos o sucios, debe limpiarse con un paño seco y suave lo antes posible.
  • Vigilancia: Si se tiene una mascota curiosa, es importante mantener siempre un ojo en la consola cuando se deje fuera de su estuche para evitar cualquier daño inesperado.