Google, más que un motor de búsqueda, es un gigante tecnológico que ofrece una serie de herramientas y funciones que la mayoría de los usuarios desconocen, pero que ofrece una mejor experiencia a los usuarios en la web, algo más entretenido y eficiente.
Desde juegos nostálgicos hasta recursos educativos, estas características están disponibles al alcance de todos, solo es cuestión de saber dónde encontrarlas. Sin embargo, esta herramienta también se ha convertido en una estrategia usada para engañar a las personas.
Una de las técnicas de manipulación digital que ha generado preocupación es el cloaking, pero, ¿a qué hace referencia este término? Liliana Carreño, presidente ejecutiva de AXEDE, explicó en conversación con SEMANA que el cloaking “es una técnica engañosa que consiste en mostrar contenido o URLs diferentes a los motores de búsqueda y a los usuarios con el propósito de manipular el ranking en los resultados de búsqueda”.
En pocas palabras, la experta dice que, cuando un motor de búsqueda como Google visita una página web, ve una versión optimizada del contenido, permitiéndole mejor clasificación, mientras que los usuarios que visitan esa misma página ven algo completamente diferente.
Si bien puede parecer una herramienta efectiva para mejorar la visibilidad de un sitio web en los resultados de búsqueda, esta estrategia engañosa tiene consecuencias serias, incluido el riesgo de que Google “desaparezca” el sitio de su motor de búsqueda.
La mejor forma en que Google detecta la implementación de cloaking en un sitio web es con ayuda de los “algoritmos avanzados y crawlers que comparan el contenido visible para los usuarios con el que se muestra a los bots de Google. También realiza análisis manuales para identificar inconsistencias”, según Liliana Carreño.
El cloaking puede dar de diferentes maneras, entre las que se destacan las de contenido, que muestran diferente contenido a los bots y a los usuarios; de redireccionamiento, el cual redirige a una página web diferente a la que se le muestra en el bot, y de imágenes, que muestra fotografías distintas a los motores de búsqueda y a los usuarios.
Adicionalmente, la experta advirtió cómo afecta al usuario, el cloaking en una página web, asegurando que esta técnica de manipulación digital tiene un objetivo: “engañar al usuario, quien espera ver el contenido mostrado en los resultados de búsqueda, pero termina en una página irrelevante o diferente, lo que genera frustración y desconfianza”.
Por su parte, aclaró que el cloaking “es penalizado por Google y por otros motores de búsqueda como Bing, ya que va en contra de las directrices de calidad de la mayoría de los buscadores”.