La lavadora es un electrodoméstico indispensable en el hogar, no solo por la comodidad que ofrece, sino también por su impacto en la eficiencia energética, la gestión del tiempo y la sostenibilidad ambiental. Este dispositivo ha transformado la manera en que se lava la ropa, eliminando la necesidad de hacerlo manualmente, un proceso que anteriormente resultaba laborioso.

Una de las principales ventajas de las lavadoras modernas es su eficiencia energética, lo que contribuye al ahorro de electricidad y agua. A diferencia de los modelos más antiguos, las lavadoras actuales cuentan con etiquetas de certificación que permiten un control más responsable de su uso. Además de su función básica de limpieza, estas incluyen programas específicos para tratar diferentes tipos de tejidos y manchas, lo que ayuda a conservar la calidad de la ropa y a evitar el desgaste ocasionado por lavados incorrectos o a mano. También mejoran la higiene, ya que algunos ciclos pueden alcanzar temperaturas más altas, eliminando bacterias y alérgenos.

Una lavadora inteligente es un electrodoméstico que incorpora tecnología avanzada. | Foto: Serghei Starus

Más allá de sus funciones fundamentales, las lavadoras modernas incorporan características avanzadas que responden a las nuevas tecnologías. Hoy en día, es posible controlarlas a través de un teléfono móvil, algo impensable hace algunos años.

¿Qué es una lavadora inteligente y cómo funciona?

Se considera una lavadora inteligente a aquel dispositivo que integra tecnología avanzada y conectividad para ofrecer una experiencia de lavado más personalizada, eficiente y conveniente. No solo cumple con la función básica de lavar ropa, sino que emplea sensores, algoritmos y conexión a internet para optimizar su rendimiento y facilitar la interacción con el usuario.

Una de las principales características de las lavadoras inteligentes es su capacidad para conectarse a internet mediante Wi-Fi, lo que permite que el usuario controle la lavadora a distancia a través de una aplicación móvil o incluso mediante asistentes virtuales como Amazon Alexa o Google Assistant.

Algunas de las funciones que pueden ser controladas desde el teléfono móvil incluyen:

1. Los usuarios pueden recibir notificaciones automáticas cuando el ciclo de lavado ha terminado, eliminando la necesidad de estar pendientes del aparato. Estas notificaciones se envían al móvil registrado, y dependiendo del modelo o marca, también pueden recibirse en el televisor. Además, es posible consultar a asistentes virtuales como Google Assistant cuánto tiempo falta para que termine el ciclo.

Estas lavadoras permiten personalizar los ciclos de lavado según el tipo de ropa y las necesidades específicas. | Foto: Cris Cantón

2. Para quienes no tienen tiempo de estar pendientes de las tareas cotidianas, la lavadora inteligente permite usar el teléfono móvil como control remoto para pausar el ciclo desde cualquier lugar y reanudarlo cuando se desee, evitando así que las prendas permanezcan húmedas durante largos periodos.

3. Adicionalmente, algunas lavadoras permiten realizar un mantenimiento automático del tambor, una práctica recomendada por los técnicos para evitar daños prematuros en el dispositivo. De este modo, se asegura que la máquina esté en óptimas condiciones para cada ciclo de lavado.

Una lavadora conectada a internet ofrece la posibilidad de explorar funciones más allá de lo básico, ya que suelen contar con interfaces de usuario intuitivas, que incluyen pantallas táctiles, botones de fácil acceso y opciones claras para la programación de ciclos. Además, muchas de ellas permiten personalizar los ciclos de lavado según las necesidades específicas del usuario, como ajustes de temperatura, velocidad de centrifugado, entre otros.