El miedo a hablar en público, también conocido como glosofobia, es uno de los miedos más comunes del mundo. Afecta a millones de personas y puede manifestarse de diversas maneras, desde un ligero nerviosismo hasta un ataque de pánico paralizante.

Una empleada tímida, nerviosa y tímida se siente avergonzada y temerosa de hablar en público en la reunión del equipo del grupo corporativo, una mujer tímida y estresada que oculta la cara durante un momento incómodo al informar en el cargo | Foto: Getty Images

Las razones por las que las personas desarrollan miedo a hablar en público son diversas y complejas. Algunos de los factores más comunes incluyen:

  • Falta de confianza: si las personas no confían en ellas mismas ni en sus habilidades, es probable que se sientan nerviosos al hablar en público. Se cree que no son lo suficientemente buenos o que no tienen nada interesante que decir.
  • Experiencias negativas: si en el pasado han tenido experiencias negativas al hablar en público, como haber sido abucheados o criticados, es más probable que desarrollen un miedo a hacerlo en el futuro.
  • Falta de preparación: no estar bien preparados para una presentación puede aumentar considerablemente el nivel de ansiedad. Si no se sabe de qué se va a hablar o no se ha practicado lo suficiente, es normal que se sientan nerviosos e inseguros.
Mujer, mujeres, negocios | Foto: Getty Image

Consejos para perder el miedo a hablar en público:

  • Aceptar que el miedo es normal: todos sentimos nerviosismo antes de hablar en público. Lo importante es no dejar que el miedo controle.
  • Prepárese bien: cuanto más preparado esté, menos nervioso se sentirá. Servirá investigar a fondo el tema, organizar las ideas y practicar la presentación con anticipación.
  • Se debe concentrar en el mensaje: no se enfoque en el miedo, sino en el mensaje que quiere transmitir. Hay que pensar en lo valioso que es lo que tiene que decir y en cómo la presentación puede beneficiar a la audiencia.
  • Respirar profundamente: cuando sienta que los nervios lo invaden, tome algunas respiraciones profundas y lentas. Esto ayudará a calmarse y a concentrarse.
  • Hablar despacio y con claridad: no hable demasiado rápido ni en voz baja. Articule bien las palabras y haga pausas para que la audiencia pueda entenderle.
  • Hacer contacto visual con la audiencia: mirar a los ojos a las personas mientras habla. Esto le ayudará a conectar con ellas y a mantener su interés.
Mujer, mujeres, negocios | Foto: Getty Image
  • Moverse naturalmente: no se quede quieto como una estatua. Mueva su cuerpo de forma natural y utilice gestos para enfatizar los puntos.
  • Sonreír: una sonrisa lo hará parecer más dispuesto y seguro de si mismo.

Perder el miedo a hablar en público no es algo que ocurra de la noche a la mañana. Requiere tiempo, esfuerzo y práctica. Pero con paciencia y perseverancia, puede superar el miedo y convertirse en un orador seguro y efectivo.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.