El agitado ritmo de vida del dueño de Meta, Mark Zuckerberg, lo lleva a visitar diferentes ciudades al día y a estar viajando constantemente, por lo que no es extraño que tenga su propio jet privado y que lo use tanto para desplazamientos largos como para trayectos muy cortos que llaman la atención de los defensores del medio ambiente, por el gran impacto que esto significa para el planeta.

Según los datos del software de seguimiento de vuelos ADS-B Exchange compilados por el programador Jack Sweeney, el multimillonario ha realizado 28 viajes diferentes entre el 20 de agosto y el 15 de octubre en Estados Unidos, señaló la cadena Fox News en su portal web.

El costo de estos viajes para el medio ambiente es altísimo, pues se calcula que en estos trayectos la aeronave arrojó más de 253 toneladas métricas de carbono, 15 veces más que las 16 que produce un estadounidense promedio durante un año, o que las 4 que se calculan por persona en el mundo, según The Nature Conservancy.

Los especialistas estiman que el Gulfstream G650, avión en el que se desplaza Zuckerberg, gastó 158.448 dólares en combustible para sus viajes durante este periodo; además, llamaron la atención en dos desplazamientos particulares: uno que solo cubrió 18 millas dentro del estado de Arizona el 15 de octubre y otro de 28 millas entre Carlsbad, California, y San Diego el 28 de agosto, según el informe de Fox.

Estos itinerarios parecen ir en contra de lo que el mismo Zuckerberg proclama sobre la lucha contra el calentamiento global y las millonarias donaciones que ha hecho a diferentes causas ambientales para alentar la lucha contra el cambio climático.

Las explicaciones de Facebook, empresa de Meta, señalan a la seguridad del propio Zuckerberg como la razón principal para que el multimillonario utilice este tipo de transporte que resulta ser poco amigable con el medio ambiente.

“Mark Zuckerberg usa aviones privados para viajar en relación con su programa de seguridad general”, señalo Facebook en una de sus intervenciones recientes.

“Desde marzo de 2022, fletamos un avión privado que es propiedad indirecta y total del Sr. Zuckerberg y es operado por una compañía de chárter independiente para viajes de negocios y personales del Sr. Zuckerberg. [...] En ciertas ocasiones, el Sr. Zuckerberg puede estar acompañado por invitados cuando usa dicho avión, y parte de nuestro personal también puede usar dicho avión para viajes de negocios”, agregó la compañía.

Pero el dueño de Meta no es el único criticado por el uso de jets privados para sus viajes. Leonardo DiCaprio y Harrison Ford, dos estrellas de Hollywood reconocidas por su constante activismo ambiental, también suelen utilizan este tipo de aparatos que producen un gran impacto al planeta.

Es el mismo caso del magnate Bernard Arnault, CEO de la importante marca de moda Louis Vuitton, quien por su cargo y la importancia de su compañía en el sector debe estar viajando de aquí para allá. Su perfil y apretado día a día lo ha obligado a disponer de un jet privado para poder llegar a tiempo a sus compromisos en otros países.

Sin embargo, Arnault se ha visto aquejado por grupos de ambientalistas que encontraron la forma de sacarlo de quicio, llevándolo a tomar una decisión radical con su jet privado.

Ante el acoso al que se vio sometido por algunas cuentas de Twitter dedicadas a publicar el itinerario de sus vuelos por el mundo, el ejecutivo decidió vender su avión privado y pasar al mercado del alquiler.

Fue el propio hijo del multimillonario, Antoine Arnault, el que salió a dar explicaciones sobre lo sucedido con el avión de su padre y en una entrevista dejó claro cómo se transportarán de ahora en adelante.

“El grupo tenía un avión y lo vendimos durante el verano: ahora nadie puede ver a dónde voy, porque alquilo aviones cuando use jet privado”, dijo Antoine Arnault, quien también explicó que el uso de estos aparatos obedece a la ventaja competitiva que le brinda a los ejecutivos de marcas como la de su padre.

“Es una herramienta de trabajo que da a los ejecutivos una ventaja en la carrera por ser los primeros en llegar a un nuevo producto o negocio. [...] No es muy bueno que nuestros competidores puedan saber dónde estamos en cualquier momento. Eso puede dar ideas, también puede dar pistas, indicios”, explicó el hijo del magnate.