Al ahora de hablar de marcas y diseños que marcaron una época, hay que nombrar, sí o sí, a Converse, compañía de calzado y ropa fundada en febrero de 1908, en la población de Malden, Massachusetts, en Estados Unidos.
Desde entonces, la firma norteamericana supo sobrevivir en un duro mercado en el que tuvo que medirse a otros fabricantes y en el que la industria deportiva fue determinante para el éxito de varios de sus modelos.
Precisamente, en 1910, la empresa dejó de fabricar botas con suela de goma para incursionar en el mercado de indumentaria deportiva y, cinco años más tarde, dar paso al icónico modelo que marcó su historia y que sigue estando vigente, las famosas Converse All Star.
Al incursionar en la industria del deporte, Converse, por ser norteamericana, optó por diseñar y fabricar calzado para los basquetbolistas, atletas que sirvieron de plataforma para impulsar a las grandes marcas.
Justamente, para rendir homenaje a uno de esos deportistas que ayudó a que Converse tuviera éxito, la firma creó el modelo Chuck Taylor, jugador en la década de 19210 triunfó en la NBA y que en 1920 se unió a la fuerza de ventas de la compañía, impulsando su modelo por todo Estados Unidos a través de la creación de las famosas ‘clínicas de baloncesto’, en las cuales se encargó de mencionar las bondades de estas zapatillas.
¿Para qué sirven los agujeros laterales de las zapatillas Converse?
Como el objetivo era brindar comodidad a los basquetbolistas que vistieran este diseño de las famosas Converse, la compañía instaló dos ojales o agujeros en la parte lateral de los zapatos con dos objetivos claros.
El primero era permitir una adecuada ventilación y transpiración en los pies, brindándoles, de esta manera, una entrada de aire extra para evitar que lesiones en la piel, propias del exceso de sudor o del roce de la media con el calzado y el pie.
Sin embargo, esta era una función secundaria, pues la principal era la de permitir un mayor ajuste del zapato al pie, por lo que estos ojales eran cruciales para que los cordones de los zapatos cruzaran por allí para lograr su objetivo.
Y es que los basquetbolistas, por razón de su oficio y de la forma cómo se practica, necesitan de un calzado que les permita saltar, cambiar de ritmo, frenar y correr sin dar paso a la incomodidad, lo que les garantiza parte de su éxito.
De esta forma, estos ojales permiten pasar por allí los cordones y lograr que los zapatos queden fijos, de una forma muy conveniente, ajustando el tobillo y protegiéndolo de lesiones por torceduras o movimientos bruscos.
Este hecho también llevó a la marca a utilizar en sus modelos Chuck Taylor cordones bastante largos, pues era necesaria esa longitud para poder utilizar los ojales laterales a la hora de amarrar y fijar las zapatillas al pie.
¿Por qué se popularizó el color blanco en las Converse Chukc Taylor?
La campaña de mercadeo de Chuck Taylor logró que la delegación norteamericana para los Juegos Olímpicos de Berlín 1936 vistiera sus zapatillas y, como era de esperarse, se necesitaba un toque especial para la ocasión.
Esta fue la razón para que el propio Taylor diseñara el calzado y los presentara blancos con una línea roja y una azul en la suela, diseño que se popularizó y que hasta hoy sigue siendo uno de los más vendidos de la marca que, desde 2003, pasó a ser propiedad de su competencia, la firma Nike.