Actualmente, son incontables las tácticas que usan los ciberdelincuentes para atacar a sus víctimas, todas con el fin de robar información personal de los usuarios para así poder cumplir sus objetivos.
Día a día, evidenciamos denuncias de personas que han caído en la trampa, ya sea porque los estafaron, suplantaron su identidad o accedieron a su información privada de forma maliciosa; todo esto, a través de las redes sociales y plataformas digitales.
Frente a esto, expertos detectaron una nueva modalidad adaptada por los delincuentes para infectar los dispositivos móviles con malware. Se trata del desarrollo de sitios falsos que se hacen pasar por chat de inteligencia artificial, especialmente aquellos basados en el popular chatbot, Chat GPT.
Estos sitios fraudulentos incluyen el nombre de ChatGPT en la URL y prometen ofrecer herramientas de marketing y publicidad basadas en tecnologías avanzadas. Sin embargo, la realidad es que el objetivo principal de los delincuentes con la difusión de esta aplicación, es infiltrar en los teléfonos un malware que roba los datos personales de los usuarios.
Teniendo en cuenta esto, los hackers aprovechan la popularidad que tiene estos chatbot basados en IA, para cerrar sitios web falsos que imitan las funciones y características de estas plataformas.
Todo se ejecuta instalando la app maliciosa como una extensión de Google Chrome, una vez allí el hacker accede a las cookies del navegador con la posibilidad de acceder a información privada de los usuarios.
Tenga en cuenta que los cookies son pequeños fragmentos de texto que los sitios web que usted visita, envía al navegador, estos permiten que las páginas recopilen información de su visita, lo que puede hacer que en una próxima ocasión estos resulten más útiles.
Así usan ChatGPT para robar sus datos personales
Una vez usted acceda a la aplicación, de inmediato en su celular se instala un código malicioso que corre como una extensión del navegador. Verá que se instalarán dos carpetas, una de estas incorpora el malware y la otra se ejecuta como proceso de instalación de la supuesta herramienta.
Para evitar que usted detecte la trampa, la primera carpeta se abrirá como una nueva ventana de Google Chrome y carga el sitio oficial de ChatGPT, por otro lado, la segunda recopila sus datos e información privada.
¿Cómo evitar este tipo de ataques?
Es importante que usted implemente unas pautas de seguridad para identificar, en primer momento, si está siendo hackeado por los ciberdelincuentes.
- Descargue aplicaciones de fuentes confiables: asegúrese de instalar solo apps que provengan de la tienda oficial de su sistema operativo, ya sea Google Play o App Store.
- Verifique la autenticidad del sitio web: siempre que reciba una URL, prevenga abrirlo antes de asegurarse que se trate de un sitio real. Identifique si hay errores ortográficos, caracteres extraños o si el dominio no coincide con la entidad.
- Mantenga su software actualizado: normalmente, las actualizaciones contienen parches de seguridad que le ayudarán a mantener protegido su dispositivo, los cuales detectan posibles amenazas de malware.
Frente a esto, se aconseja que las personas sean precavidos con sus resultados de búsqueda, asimismo de aquellos que contienen anuncios, detrás de esta fachada se puede esconder un virus que ocasiona daños irreparables en su móvil.
Recuerde que existen varios tipos de malware como los siguientes:
- Troyanos: es usado por los piratas informáticos y se presenta con extensiones como ‘exe, .vbs, .bat’.
- Virus: estos infectan archivos o programas dejándolos inservibles y afectando el funcionamiento de todo el sistema operativo.
- Adware: este se encarga de mostrar publicidad al usuarios para que este navegue por la web, normalmente puede venir incluido en un software.
- Gusanos: se propaga por medio de archivos, correos o plataformas digitales; su función es consumir todos los recursos de su celular.
- Spyware: recopila información de los usuarios por medio de su historial de navegación, contraseñas o cuentas bancarias. Se encuentra en sitios web de descargas.