Sony planea expandir su negocio de videojuegos más allá de las videoconsolas con el acuerdo estratégico que ha firmado con la compañía coreana de entretenimiento digital NCSOFT.
NCSOFT es una firma con sede en Seúl, Corea el Sur, que nació en 1997 y que en este tiempo se ha hecho un hueco en la industria del entretenimiento digital, como editor y desarrollador de videojuegos con alcance global.
Su principal negocio se centra en los juegos en línea y para dispositivos móviles, con franquicias como Lineage, Aion, Guild Wars y Blade & Soul. Precisamente esta experiencia es la que permitirá a Sony “expandirse más allá de las consolas” y “ampliar el alcance de PlayStation a una audiencia más amplia”.
Así lo ha indicado el presidente y director ejecutivo de Sony Interactive Entertainment, Jim Ryan, con motivo de la firma de una asociación comercial estratégica global con NCSOFT.
Como se recoge en un comunicado conjunto, esta colaboración se desarrollará en varios campos comerciales globales, incluido el móvil.
A propósito, recientemente se conoció que Activision ha ideado un sistema de juego en el que, a través de tecnología de análisis de datos y modelos de aprendizaje automático, se consiguen combinar funcionalidades de los videojuegos con la visualización de un programa de video, con el objetivo de generar un juego multimedia interactivo.
La desarrolladora de videojuegos tiene en cuenta que, en algunas ocasiones, los jugadores llevan a cabo partidas de videojuegos mientras visualizan, al mismo tiempo, un video o ‘streaming’ de la partida de otro jugador, incluso de otro videojuego. En este sentido, ha ideado un método para combinar ambos contenidos de forma inmersiva.
Se trata de un sistema que, según se describe en la patente registrada por Activision, publicada a mediados de noviembre en la Oficina de Patentes y Marcas Registradas de Estados Unidos, sincroniza los juegos con la visualización de videos, mezclando la acción que se está reproduciendo en el video con la acción del juego.
Así, la compañía pretende utilizar sistemas de análisis de imágenes en tiempo real y distintas tecnologías para modificar dinámicamente el contenido del videojuego “basándose en contenido no relacionado experimentado por un usuario”, tal y como detalla.
Como resultado, los jugadores verán modificadas sus partidas con base en lo que esté ocurriendo en el video. Por ejemplo, en una partida de Call of Duty: Modern Warfare III, mientras se visualiza un video de Warzone 2.0, se podrán combinar distintas características de ambos videojuegos.
En concreto, el sistema monitoriza la transmisión en vivo continuamente para identificar puntos clave a medida que ocurren, por ejemplo, un ataque concreto en un videojuego de lucha. Todo ello a través de herramientas como los modelos de aprendizaje automático, que pueden reconocer las señales visuales y auditivas del video en cuestión y, así, escoger los momentos más álgidos para utilizarlos como complemento para el videojuego.
De esta forma, cuando se detecta un punto clave, el sistema genera instantáneamente variantes contextuales del juego que se esté disfrutando, por ejemplo, minijuegos o mejoras de funciones que complementen la acción en pantalla.
Este sistema también da ventajas a los jugadores. Por ejemplo, si el usuario está jugando a un videojuego de fútbol y viendo a la vez un partido en la vida real, en caso de que ocurra algo en el partido en vivo, por ejemplo, que se bloquee un gol, se impulsarán automáticamente las habilidades necesarias para parar también el gol la partida del videojuego.
*Con información de Europa Press.