Pese a que el diseño de los teléfonos inteligentes modernos incluyen mejoras que hacen a los dispositivos más resistentes, aún existe la necesidad de usar una funda que proteja a este aparato de uso diario de los impactos.
Por esa razón, algunos fabricantes de teléfonos inteligentes suelen incluir una funda de goma transparente en la caja de sus dispositivos. Sin embargo, a pesar de su aparente utilidad, a largo plazo debido estas fundas pueden convertirse en una decepción.
Esto se debe a que la funda tiende a ponerse de color amarillo, lo que hace que el teléfono móvil, por más moderno que sea, no luzca con el mejor aspecto, un detalle que resulta de suma importancia para miles de usuarios en todo el mundo que, precisamente, invierten grandes sumas de dinero para hacerse con el mejor de los equipos disponibles en el mercado de la tecnología.
Por qué la funda del celular se pone amarillenta
Las fundas transparentes que vienen con los teléfonos generalmente están fabricadas con TPU (Poliuretano Termoplástico), un material muy versátil, conocido por su resistencia, flexibilidad y bajo costo.
Sin embargo, el su punto débil es que es muy propenso a la degradación, por ello, con el paso del tiempo tiende tomar un tono amarillento.
Paradójicamente, el material original del TPU es de color amarillo, pero los fabricantes emplean un tinte azul para lograr darle la transparencia deseada por los usuarios.
Las cadenas moleculares del TPU, que mantienen unidas las moléculas de polímero, tienden a desordenarse y con la exposición a la luz ultravioleta empieza a aparecer el tono amarillento.
Pese a esa situación, muchos creadores de fundas para teléfonos siguen empleando el TPU al ser una opción a la que se le pueden aplicar diseños que cubran la aparición del tono amarillento. Adicionalmente, ese material brinda resistencia, así como capacidad de amortiguación a un bajo costo.
¿Es posible evitar que la funda se ponga amarilla?
Pese a que en YouTube y TikTok suelen aparecer videos en los que se ofrecen métodos que prometen revertir el amarilleo de las fundas transparentes, la realidad es que es casi imposible recuperar la transparencia original de la funda.
En ese sentido, pese a lo que se promete en internet, limpiar la funda con agua y jabón u otros elementos como alcohol isopropílico o incluso con baños de lejía no funcionará para restaurar el aspecto original.
Pese a que las fundas queden limpias y desinfectadas, el tono amarillento seguirá ahí.
La solución es optar por una nueva funda
Ante este problema, la mejor alternativa es adquirir una nueva funda. Debido a que el TPU es un material reciclable, no se genera un impacto ambiental nocivo al reemplazar una funda desgastada. Por otra parte, si se tiene en cuenta que esas fundas tardan meses adquirir un notable tono amarillo, es posible que la funda deba ser cambiada unas pocas veces durante varios años.
También existe la posibilidad de probar con otros materiales o colores para las fundas, ya que, aunque cualquier material puede degradarse con el tiempo, es probable que paso del tiempo no tenga los mismos efectos que en el caso del TPU.