China enviará el martes 30 de mayo, por primera vez, a un astronauta civil al espacio para una misión a la estación espacial Tiangong, con el objetivo de enviar un vuelo tripulado a la Luna de aquí a 2030.
Hasta ahora, todos los astronautas chinos enviados al espacio han sido miembros del Ejército Popular de Liberación.
Gui Haichao, profesor de Aeronáutica y Astronáutica en la Universidad Beihang, realizará pruebas científicas durante la misión, declaró el lunes (29 de mayo) a la prensa Lin Xiqiang, portavoz de la Agencia Espacial de Vuelos Tripulados del país.
El astronauta llevará a cabo “experimentos en órbita a gran escala” para estudiar “nuevos fenómenos cuánticos, sistemas espaciales tiempo-frecuencia de alta precisión, la verificación de la relatividad general y el origen de la vida”, según el vocero.
“Siempre soñé con esto”, dijo Gui el lunes en una rueda de prensa.
Gui procede de una “familia ordinaria” de la provincia norteña de Yunnan, según su universidad.
“Comenzó a interesarse por lo aeroespacial” al escuchar en la radio las noticias sobre el primer chino en viajar al espacio, Yang Liwei, en 2003, publicó el centro en las redes sociales.
Su participación en el vuelo es “especialmente significativa”, estimó para la AFP el experto independiente Chen Lan, dado que en las misiones anteriores solo habían viajado astronautas formados como pilotos que efectuaban labores más bien técnicas, y no científicas.
“Esto significa que a partir de esta misión, China abre la puerta del espacio a los ciudadanos corrientes”, señaló.
Están programados para despegar del Centro Jiuquan de Lanzamiento Satelital en el noroeste de China el martes a las 09H31 locales (01H31 GMT), precisó la agencia.
El comandante de misión será Jin Haipeng —en su cuarta misión espacial, según la prensa estatal— y el tercer tripulante será el ingeniero Zhu Yangzhu.
Gui será “el principal responsable del funcionamiento en órbita de las cargas útiles experimentales de ciencia espacial”, señaló Lin.
Sueño espacial
Bajo el presidente Xi Jinping, China ha intensificado la conquista de su “sueño espacial”.
La segunda mayor economía mundial ha invertido millones en su programa espacial bajo control militar, con la esperanza de enviar humanos a la Luna.
Pekín está buscando alcanzar a Estados Unidos y Rusia después de años de estar a la zaga.
Además de una estación espacial, China planea construir una base en la Luna, y la Administración Espacial Nacional del país dice que pretende lanzar una misión lunar tripulada antes de 2030.
“El principal objetivo es realizar un primer alunizaje (de una tripulación) en la Luna de aquí a 2030 y proceder a una exploración científica lunar” y también análisis en materia de tecnología, dijo el portavoz Lin Xiqiang.
El módulo final de la estación Tiangong, cuyo nombre significa “Palacio Celestial”, logró acoplarse el año pasado con la estructura principal.
La estación contiene numerosos equipos científicos de vanguardia, incluido “el primer sistema de reloj espacial atómico en frío”, según la agencia estatal de noticias Xinhua.
La estación Tiangong debe permanecer en la baja órbita espacial a una distancia de entre 400 y 450 km sobre el planeta por al menos diez años, para permitir a China mantener una presencia humana a largo plazo en el espacio.
Estará tripulada permanentemente al rotar equipos de tres astronautas, quienes efectuarán experimentos científicos y ayudarán a probar nuevas tecnologías.
El gigante asiático no piensa utilizar Tiangong para fines de cooperación mundial, como la Estación Espacial Internacional, pero Pekín ha dicho que está abierta a la colaboración extranjera.
China “está impaciente y desea que haya participación de astronautas extranjeros en misiones tripuladas en la estación espacial del país”, abundó Lin el lunes.
La potencia asiática está al margen de la Estación Espacial Internacional desde 2011, cuando Washington prohibió a la Nasa colaborar con Pekín.
*Con información de AFP.