Aunque está claro que el Sol sale en el día y la Luna en la noche, también lo es que, en ocasiones, cuando se mira al cielo en medio de un día radiante, se puede ver el único satélite natural que tiene el planeta, por lo que muchos se han preguntado acerca de las razones por las que sucede este fenómeno.
Desde la Nasa, han entregado la respuesta a quienes tenían esta duda; Sarah Noble, científica de la agencia espacial estadounidense, asegura que la Luna ha sido asociada a la noche gracias a los libros y a la fantasía; sin embargo, aclaró que es un cuerpo celeste que pasa igual cantidad de tiempo en el cielo diurno como en el nocturno.
Noble aclara que la Luna, a diferencia del Sol, no tiene luz propia y se puede ver en la noche porque refleja el brillo del astro rey; además, indica que si recibiera la luz durante todo el día, en efecto se podría ver durante las 24 horas.
La explicación de la científica indica que la Luna está ubicada mucho más cerca de la Tierra que el resto de las estrellas, por lo que es posible verla en los días despejados, siempre y cuando “esté en la parte derecha del cielo”.
“Durante una Luna llena, esta está opuesta al Sol en el cielo. Por eso podemos ver la cara completa de la Luna reflejando la luz del Sol. A medida que la Tierra gira, la Luna sale justo cuando el Sol se pone, pero solo en ese único día del mes”, explicó Noble.
En conclusión, desde la Nasa explican que la Luna se puede ver de día solo en dos ocasiones; una de ella es en los días previos a la Luna llena y mirando hacia al este. La otra oportunidad es justo después de este fenómeno, pero mirando en dirección al occidente, y se podrá apreciar hasta unos minutos después de que el sol aparezca.
La Nasa logra la foto del rostro de un oso en la superficie de Marte
Mientras continúa la exploración de Marte por parte de las diferentes sondas enviadas por la Nasa al planeta rojo, se siguen conociendo diferentes imágenes que dan cuenta de su geografía, su aspecto y los diferentes y extremos climas que se viven allí.
La última entrega es, además de asombrosa, bastante curiosa, pues la Mars Reconnaissance Orbiter envió una captura en la que se ve una extraña formación que para muchos resultó ser una forma bastante tierna y familiar.
La cámara HiRise logró esta instantánea a 251 kilómetros por encima de la superficie del planeta vecino y se ve algo muy parecido a una cabeza de un oso. La Universidad de Arizona fue la encargada de analizar la fotografía y de explicar qué elementos conformaban esa curiosa figura.
Según detallaron, dos pequeños cráteres hacen las veces de ojos, mientras que, según el portal Hipertextual, “el hocico y las fauces estarían formadas por una estructura colapsada en forma de V”. El contorno de la figura también explican que está formado por sedimentos o aclaran que podría ser una chimenea volcánica o de lodo.
Este descubrimiento hizo recordar un hecho de 1976, cuando la nave espacial Viking 1 registró lo que parecía ser un rostro humano, hecho que tuvo que esperar hasta 2001 para ser descartado por la sonda Mars Global Surveyo, la cual confirmó que era una forma rocosa que por la escasa resolución de la cámara anterior dio esa apariencia.
Lo cierto es que las sondas enviadas al planeta rojo seguirán registrando extrañas figuras compuestas por las formaciones rocosas y que darán mucho de qué hablar.