En los últimos años, los hogares han experimentado un aumento significativo en las facturas de los servicios públicos por diferentes motivos. Aparte de eso, cada vez se adquieren más aparatos para la casa que ayudan con las tareas domésticas. En ocasiones, podrían relacionarse esos dos hechos, aunque no puede generalizarse pues, a mayor avance tecnológico, también menor consumo.

Por ejemplo, a la lavadora, la nevera y los televisores se han venido sumando, con los años, hornos microondas, secadoras, computadores, parlantes inteligentes, aspiradoras robot, módems, y cargadores para celulares, tabletas y otros dispositivos. Y podría creerse que esta suma de electrodomésticos implica un aumento de consumo, aunque —de nuevo— no siempre es así.

Electrodomésticos de cocina que más consumen energía. | Foto: Getty Images

En caso de que sí lo hubiera, se vuelve importante el ahorro de energía, no solo para prevenir más efectos negativos en el medioambiente, sino con el fin de buscar un ahorro económico a la hora de pagar las facturas.

Contrario a lo que algunas personas piensan, existen electrodomésticos que siguen consumiendo energía a pesar de que se encuentren apagados. Esto sucede porque permanecen conectados a una fuente de poder, incluso si no están siendo usados en ese momento.

De acuerdo con la Agencia Internacional de la Energía, los aparatos eléctricos apagados o en modo de espera consumen, en una casa promedio, alrededor de 1,6 kilovatios diarios. Este gasto representa entre el 5 % y el 10 % del consumo total de energía en el hogar.

El consumo de energía de un aparato eléctrico apagado o en stand by suele ser más notorio en las noches, pues es cuando el objeto no está en uso, aunque continúa conectado. A este efecto se le conoce popularmente como ‘corriente vampiro’.

Los electrodomésticos inteligentes pueden ayudar a tener un ahorro en el consumo de energía. | Foto: Getty Images

Este término hace referencia a los dispositivos o electrodomésticos que, aunque se encuentren apagados o en modo de espera, siguen consumiendo energía eléctrica, representando un gasto significativo en la factura de la luz.

Según reseña el Ente Provincial Regulador de la Energía en Argentina, “para reducir la corriente vampiro, una opción son los tomacorrientes múltiples que pueden apagarse y los que tienen sensores de presencia que inhabilitan los dispositivos innecesarios, obstruyendo el paso de energía”. Otra opción más práctica consiste en simplemente desconectar los aparatos eléctricos cuando no están en uso.

En un mundo donde la sostenibilidad y el consumo responsable están en primer plano, acciones simples como desconectar el cargador del teléfono pueden contribuir significativamente a reducir el desperdicio electrónico. Se puede descubrir cómo también se puede ser parte del cambio. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Electrodomésticos que se pueden desconectar en la noche para ahorrar luz

  • Cargadores de dispositivos móviles: Aunque es una práctica común dejar el teléfono o la tableta conectados al cargador durante toda la noche, este mal hábito puede inflar considerablemente los gastos en sus finanzas. Por ende, es mejor desconectarlos cuando no estén en uso.
  • Electrodomésticos de cocina: Freidoras de aire, licuadoras y tostadoras son algunas de las más usadas, que en ocasiones suelen permanecer conectados casi todo el día.