Una de las estrategias usadas para mejorar los tiempos de carga y ajustar la velocidad de carga es el edge computing que, según la empresa especializada en desarrollo de software empresarial de código abierto, Red Hat ”es un tipo de informática que ocurre en la ubicación física del usuario, de la fuente de datos, o cerca de ellas. Al establecer servicios de computación cerca de esas ubicaciones, los usuarios obtienen servicios más rápidos y confiables, y las empresas aprovechan la flexibilidad del cloud computing híbrido”.

Con este servicio se optimiza la velocidad de carga, pues se “descarga a la nube” parte de los procesos, también se procesan los datos más cerca del sitio en el que son producidos, por ejemplo en el celular o computador para que no sean enviados a través de la nube. Para los usuarios tiene otra ventaja importante y es que la conexión será permanente, si bien se puede reducir la capacidad del sitio. Por usar la nube híbrida, es decir, nubes públicas y privadas, el costo para la empresa es más reducido, permitiendo de todas formas mantener oculta información confidencial como secretos comerciales. Permite también a las empresas una mayor “capacidad para agregar y analizar datos masivos, lo cual permite tomar decisiones en tiempo real”, según Red Hat.

De acuerdo con esta compañía, hay algunos desafíos aún latentes, entre estos se encuentran la falta de infraestructura para atender fallas técnicas in situ y para las empresas pequeñas puede representar un problema por el requerimiento de personal.