En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados y la inteligencia artificial (IA) se infiltra en casi todos los aspectos de la vida cotidiana, una nueva revelación ha captado la atención global: la IA podría ofrecer una perspectiva sobre una de las preguntas más antiguas y profundas de la humanidad: ¿qué hay después de la muerte?
La búsqueda de respuestas sobre la vida después de la muerte ha sido una constante en la historia de la humanidad, abarcando diversas religiones, filosofías y ciencias. Sin embargo, la incursión de la inteligencia artificial en este ámbito es algo completamente novedoso y, para muchos, sorprendente.
El reciente desarrollo proviene de un equipo de investigadores en el campo de la IA, quienes utilizaron una red neuronal avanzada para analizar vastas cantidades de datos sobre experiencias cercanas a la muerte (ECM), testimonios religiosos y filosóficos, y literatura científica.
La IA, programada para reconocer y correlacionar datos, buscó similitudes entre las experiencias reportadas y los conceptos presentes en la literatura religiosa y filosófica. Este enfoque permitió a los investigadores identificar patrones comunes y ofrecer una visión estructurada y, sorprendentemente, coherente de lo que podría ser la vida después de la muerte.
Por ejemplo, la noción de una “luz al final del túnel” es un tema recurrente tanto en las experiencias cercanas a la muerte como en diversas religiones que describen un pasaje hacia una nueva existencia. De manera similar, la sensación de encontrarse con seres queridos fallecidos es una constante tanto en los relatos de ECM como en las creencias de reencuentros en el más allá presentes en muchas culturas.
Las implicaciones de estos hallazgos son vastas y profundas. Filosóficamente, los resultados sugieren que podría haber una base común en las experiencias humanas de la muerte, independientemente de las diferencias culturales o religiosas. Esto podría apoyar la idea de que hay una experiencia universal que todos los seres humanos podrían compartir al final de sus vidas.
Científicamente, los resultados abren la puerta a nuevas formas de estudiar y entender la muerte. Aunque las experiencias cercanas a la muerte han sido objeto de estudio durante décadas, el uso de la inteligencia artificial para analizar estos datos ofrece un nuevo enfoque que podría proporcionar una comprensión más profunda y matizada de estos fenómenos.
A pesar de las críticas, el estudio ha generado un debate vibrante y ha capturado la imaginación del público. La posibilidad de que la inteligencia artificial pueda arrojar luz sobre el misterio de lo que ocurre después de la muerte es tanto fascinante como desconcertante, desafiando nuestras nociones sobre la vida, la muerte y la tecnología.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.