Un equipo de científicos del Instituto de Microbiología de la Academia de Ciencias en China, liderado por la microbióloga Xinli Wei, participó en una reciente investigación publicada por la revista Advances in Microbiology en la que aseguran haber encontrado formaciones similares a los hongos en el planeta Marte.

En el documento publicado los expertos adjuntaron varias imágenes tomadas hace años por los rovers Curiosity y Opportunity, que pertenecen a la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (Nasa) y que fueron enviados a la superficie del planeta rojo para llevar a cabo labores de investigación y exploración.

Las imágenes suministradas por los científicos, que evidencian lo que podría ser la presencia de hongos marcianos, estaban acompañadas por planteamientos sobre la posibilidad de que este tipo de organismos pudieran prosperar en dicho territorio gracias a “entornos de radicación intensa”, según escribieron los autores del artículo.

“Fotos secuenciales documentan que los especímenes marcianos parecidos a hongos emergen del suelo y aumentan de tamaño, incluidos los que se asemejan a los bejines (Basidiomycota). Después de la destrucción de los especímenes esféricos por las ruedas del rover, aparecieron nuevas esferas, algunas con tallos, sobre las crestas de las viejas huellas”, agregaron los científicos.

Los hallazgos liderados por el Instituto de Microbiología de la Academia de Ciencias en China podrían brindar pistas sobre la posibilidad de que organismos terrestres, como los hongos, puedan sobrevivir en condiciones como la del planeta rojo.

Justamente, la principal tarea que está realizando la Nasa en ese lugar es recopilar muestras rocosas que traerá de vuelta a la Tierra en el año 2030 para su respectivo análisis, pues el objetivo es determinar si hace millones de años hubo vida microbiana en Marte.

Una de las fotografías que ha llamado la atención se conoció recientemente, pues el rover Perseverance capturó un extraño fenómeno similar al de un arcoíris, a pesar de que científicamente no es posible encontrar ningún arcoíris en el planeta Marte. | Foto: Getty Images

No obstante, otros investigadores y expertos en este tipo de misiones han explicado que las revelaciones hechas por el equipo de científicos liderado por la microbióloga Xinli Wei no son suficientes para saber con exactitud si se trata de hongos que puedan ser equiparables con los organismos que habitan nuestro planeta Tierra.

“Afirmar que los hongos están brotando por todo Marte es una afirmación extraordinaria que requiere mejor evidencia que un análisis de la morfología fotográfica por un conocido maniático que ha afirmado, sobre la base del mismo tipo de análisis, que ha visto campos de cráneos en Marte”, aseguró Paul Myers, biólogo de desarrollo de la Universidad de Minnesota.

“¿Podrían los hongos sortear estas condiciones? Quizás, pero la evidencia de eso es escasa”, concluyó el experto, en declaraciones citadas por el portal DigitalTrends.

Entre tanto, el artículo publicado en la revista Advances in Microbiology concluye que aunque las similitudes en la morfología entre los aparentes hongos marcianos y los hongos terrestres no son “prueba de vida”, lo que sí evidencia el estudio es que el crecimiento, el movimiento y los cambios de forma y ubicación de estos organismos apoyan la hipótesis de que hay vida en Marte.

Imágenes inéditas de Marte

Recientemente también se conoció un registro fotográfico de 360 grados tomados por el vehículo de exploración Curiosity Mars de la Nasa, ubicado actualmente en la zona del cráter Gale del planeta Marte.

El panorama completo de la superficie marciana está integrado por 132 imágenes individuales tomadas el pasado 15 de abril de 2021, mientras los expertos de la agencia espacial explicaron que las capturas fueron equilibradas en sus colores para que las características representarán lo más preciso posible las condiciones reales del planeta rojo.

Desde su aterrizaje en el planeta rojo el 6 de agosto del año 2012, el rover Curiosity ha recorrido algo más de 25 kilómetros en la zona del cráter Gale hasta la ladera del Monte Sharp, una elevación en el centro del cráter que contiene material sedimentario, es decir, rocas que se forman por acumulación de partículas transportadas por el agua, el hielo o el viento.