La NASA ha alcanzado un nuevo hito en las comunicaciones espaciales al recibir exitosamente un video transmitido desde una distancia de 31 millones de kilómetros. Este avance se logró a través de un experimento realizado por la sonda espacial Psyche, como parte de la prueba del Sistema de Comunicaciones Ópticas del Espacio Profundo (DSOC), una tecnología avanzada diseñada para mejorar la transmisión de datos en futuras misiones interplanetarias.
El experimento consistió en la transmisión de un video de 15 segundos que mostraba a un gato llamado Taters, propiedad de un empleado del Jet Propulsion Laboratory (JPL) de la NASA. En el video, el gato atigrado de color naranja persigue el punto rojo de un puntero láser. }
A pesar de la inmensa distancia desde la cual fue enviado, el video tardó solo 101 segundos en llegar a la Tierra, un tiempo sorprendentemente corto que pone de manifiesto el potencial de esta tecnología.
El DSOC utiliza un sistema de comunicación basado en láser infrarrojo para transmitir datos desde el espacio, lo que representa un avance significativo en comparación con los métodos tradicionales de radiofrecuencia.
Las estaciones receptoras en la Tierra, equipadas con telescopios y módems, convierten la luz láser en datos digitales, permitiendo la transmisión a velocidades de hasta 1.2 gigabits por segundo. Esta velocidad es esencial para misiones espaciales que requieren la transferencia de grandes volúmenes de datos, como imágenes y videos de alta definición.
Pam Melroy, Administradora Adjunta de la NASA, subrayó la importancia de este logro, destacando que “no solo hemos demostrado la viabilidad de enviar video desde el espacio, sino que también hemos establecido un nuevo estándar para la velocidad de las comunicaciones interplanetarias”.
Este éxito refuerza el trabajo de la NASA en el desarrollo de tecnologías capaces de satisfacer las crecientes demandas de transmisión de datos en misiones futuras, especialmente aquellas con destino a Marte y más allá.
Vale la pena recordar que la misión Psyche, lanzada el 13 de octubre de 2023, tiene como objetivo explorar el asteroide metálico Psyche, ubicado en el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter. Este asteroide, compuesto principalmente de hierro y níquel, podría ser el núcleo expuesto de un planetesimal, una estructura que no llegó a formarse completamente como un planeta. Los científicos esperan que los datos recolectados por la sonda proporcionen información valiosa sobre la formación de la Tierra y otros planetas en el sistema solar.
Importancia de la transmisión
La prueba del DSOC con la misión Psyche representa un avance crucial en las comunicaciones espaciales, al superar las limitaciones de los métodos tradicionales. La capacidad de transmitir datos a largas distancias con alta velocidad es fundamental para el éxito de misiones que involucran exploraciones más allá de nuestro sistema solar.
Este experimento también marca la primera demostración de comunicaciones ópticas más allá del sistema ya probado entre la Tierra y la Luna. Al lograr una transmisión eficiente desde una distancia más de 100 veces mayor que la que separa la Tierra de la Luna, la NASA ha demostrado el potencial de esta tecnología para futuras misiones interplanetarias.
De acuerdo con la NASA, el éxito de la transmisión del video desde 31 millones de kilómetros de distancia es un testimonio del avance tecnológico que representa el Sistema de Comunicaciones Ópticas del Espacio Profundo. Este desarrollo no solo valida la capacidad del DSOC para manejar grandes volúmenes de datos, sino que también establece un nuevo referente en las comunicaciones espaciales.