Space X, la compañía de Elon Musk, sigue adelante con sus planes para poder llevar misiones espaciales tripuladas a la Luna y, en medio de ese camino, confirmó una noticia que la acerca mucho más a ese objetivo.
La propia empresa, que ya ha lanzado múltiples cohetes al espacio, ha señalado que uno de sus motores espaciales Raptor ha funcionado a la perfección en las condiciones requeridas por el aterrizador lunar tripulable que desarrolla con la NASA.
HLS-Starship (Human Landing System) será empleado durante las misiones Artemis III y Artemis IV para llevar astronautas estadounidenses cerca del Polo Sur de la Luna.
El Starship HLS estará propulsado por dos variantes de los motores Raptor de la compañía: uno optimizado para operar a presión atmosférica al nivel del mar y otro optimizado para operar en el espacio o en el vacío, donde no hay atmósfera.
El mes pasado, SpaceX demostró el rendimiento de un Raptor optimizado al vacío a través de una prueba que confirmó con éxito que el motor puede arrancar en condiciones de frío extremo resultantes de un tiempo prolongado en el espacio.
Un desafío que diferencia las misiones Artemis de aquellas en órbita terrestre baja es que los módulos de aterrizaje pueden permanecer en el espacio sin encender motores durante un período prolongado de tiempo, lo que hace que la temperatura del hardware caiga a un nivel por debajo del que experimentarían en una misión mucho más corta en órbita terrestre, informa la NASA.
Uno de los primeros hitos de las pruebas que SpaceX completó bajo su contrato Artemis III en noviembre de 2021 fue también una prueba de motor, que demuestra la capacidad del Raptor para realizar una fase crítica de aterrizaje en la Luna.
En un disparo de prueba de 281 segundos de duración, Raptor demostró la parte de descenso motorizado de la misión, cuando el Starship HLS abandona su órbita sobre la superficie lunar y comienza su descenso hacia la superficie de la Luna para aterrizar. La prueba tenía dos objetivos: mostrar la capacidad del Raptor para cambiar el nivel de potencia del motor a lo largo del tiempo, conocido como perfil de aceleración, y que el motor funcione durante todo el tiempo de la fase de descenso motorizado.
Los motores Raptor de SpaceX se pondrán a prueba durante la segunda prueba de vuelo integrada de Starship y Super Heavy de la compañía que preside Elon Musk.
EE. UU. demanda a SpaceX por presunta discriminación
El Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó el jueves una demanda contra SpaceX, la compañía espacial que fundó y dirige Elon Musk, por presuntas prácticas discriminatorias en sus contrataciones, las cuales han afectado a refugiados y personas que han solicitado o ya les fue concedido el asilo.
De acuerdo con la denuncia presentada ante una corte administrativa dentro del departamento, SpaceX aseguró indebidamente que la ley federal de control a las exportaciones le prohibía contratar a personas que no fueran ciudadanos estadounidenses o residentes permanentes.
Como resultado, SpaceX desalentó a refugiados y solicitantes de asilo, así como a beneficiarios de ese tipo de protección, a que solicitaran trabajo en la compañía, según la denuncia.
Los controles a las exportaciones suelen estar dirigidas a proteger la seguridad nacional de Estados Unidos e impulsar los objetivos comerciales de la nación.
Prohíben el envío de tecnologías específicas, armas, información y software a ciertas naciones, además de que restringen compartir o difundir este tipo de material e información a “personas estadounidenses”.
Sin embargo, el Departamento de Justicia subrayó que el término abarca no solo a ciudadanos estadounidenses, sino también a residentes permanentes, refugiados y aquellos que hayan solicitado o se les haya concedido el asilo.
El departamento acusó que SpaceX también se rehusó a considerar “de manera justa” las solicitudes o contratación de este grupo de personas.
Los puestos de trabajo en cuestión incluían tanto aquellos para los que se exigían altos grados académicos como otros para soldadores, cocineros y operadores de grúas en la compañía.
El Gobierno de Estados Unidos busca una “justa consideración y el pago de sueldos atrasados” para las personas a las que se disuadió del empleo o se les negó el trabajo en SpaceX a causa de la supuesta discriminación por parte de la compañía, además de sanciones civiles no determinadas.
SpaceX, con sede en Hawthorne, California, no respondió a una solicitud de comentarios.
*Con información de Europa Press.