Con el avance tecnológico, internet se ha convertido en una herramienta fundamental en la vida diaria de los usuarios, tanto para asuntos personales como laborales. La comunicación, en gran medida, depende de la conexión a una red inalámbrica.
Además, internet alberga una amplia gama de información de diversas categorías que son de interés para los usuarios.
Sin embargo, al ser el principal medio de comunicación de las personas, un uso adecuado puede proporcionar una variedad de beneficios, pero cuando se utiliza con propósitos maliciosos, puede representar un riesgo para la seguridad de los internautas.
Es evidente que internet ha generado dependencia en las personas, ya sea porque trabajan, estudian, se comunican con amigos, realizan llamadas o transacciones bancarias desde allí. Por lo tanto, es inevitable que los datos privados estén expuestos al riesgo de caer en manos de ciberdelincuentes. Uno de los lugares menos seguros para que esta información personal circule es la dark web.
Dark web: ¿qué es y por qué es tan peligrosa?
También conocida como la “web oscura”, se caracteriza por ser una parte de internet que no está indexada por los motores de búsqueda convencionales, lo que significa que se necesita un software especial para acceder a ella.
Según varios expertos, en esta web los usuarios pueden encontrar contenido y servicios que no están disponibles en la internet tradicional, muchos de los cuales son ilegales y pueden ser utilizados con fines criminales. Por ejemplo, se pueden encontrar mercados de drogas, armas, tarjetas robadas, contenido sexual ilegal y otros servicios ilícitos.
Este sitio es considerado el territorio de hackers y piratas informáticos, quienes lo han tomado por completo para cometer sus delitos sin ser detectados. Así es como las nuevas tecnologías se han convertido en la principal amenaza para los usuarios, quienes corren el riesgo de caer en manos de criminales y de que sus datos personales sean comprometidos.
Los ciberdelincuentes utilizan varias modalidades para obtener datos personales y hacer que lleguen a estas páginas oscuras con fines maliciosos. Una de ellas es a través de contraseñas débiles y reutilizadas. Aunque esta es una práctica común, no es recomendada por los expertos en seguridad informática, ya que puede facilitar el acceso de los hackers a las cuentas de los usuarios, especialmente si alguna de estas sufre una brecha de seguridad.
Según Keep Security, uno de los mayores riesgos al utilizar la misma contraseña para todas las cuentas es el ataque de relleno de credenciales. Así se puede tomar el control de las cuentas de los usuarios, lo que a menudo conduce a un acceso no autorizado y la pérdida de cuentas e información personal que pueden terminar en la dark web.
Además, los ciberdelincuentes pueden obtener información mediante el phishing, una práctica empleada para engañar a las personas y hacer que envíen información sensible, como correos electrónicos, números de tarjetas y contraseñas. Caer en esta trampa puede permitir que los estafadores obtengan fácilmente datos personales y acceso a cuentas, que luego pueden vender en este tipo de páginas “ocultas”.
A pesar de que esta problemática continúa avanzando en lugar de mitigarse, existen medidas preventivas que se pueden tomar. Por ejemplo, se puede utilizar la herramienta Google One para determinar si los datos confidenciales se encuentran en la dark web.
Desde su centro de ayuda, explican que es una plataforma diseñada para monitorear y obtener informes de la “web oscura”, para saber si hay datos asociados con la dirección de correo electrónico del usuario, entre otros. Los resultados que se encuentren en brechas de seguridad pueden incluir información como nombre, dirección postal, número de teléfono, contraseña y nombre de usuario.