La red social TikTok ofrecerá a sus usuarios comprar directamente productos propuestos por los creadores de contenidos en su plataforma, informó la empresa este martes.

Este anuncio representa una ampliación de la sociedad lanzada en octubre de 2020 con Shopify, una plataforma que permite a marcas introducirse en el comercio en línea a través de TikTok. Inicialmente, el acuerdo permitía a los usuarios del canadiense Shopify hacer publicidad en esa red social.

Los vendedores podrán crear una “mini boutique” en TikTok e incluir enlaces a productos directamente en sus videos presentados en la plataforma, que tiene 100 millones de usuarios solo en Estados Unidos.

La empresa facilitará así “la creación de contenido atractivo que lleve a los consumidores directamente a la compra en línea”, explicó Blake Chandlee, presidente de actividad de empresas de TikTok.

TikTok, filial del grupo chino ByteDance, tardó en monetizar sus contenidos antes de lanzarse a la publicidad el año pasado y ahora al comercio online.

En los últimos meses, las redes sociales en general buscan convertir su popularidad y la asiduidad de sus usuarios en transacciones comerciales.

China llama al orden a gigantes digitales

Entre tanto, las autoridades chinas convocaron a una veintena de empresas, incluidos los gigantes de internet Alibaba, Tencent y ByteDance (empresa matriz de TikTok), y le hicieron un llamado al orden por sus prácticas, en un momento en el que Pekín aprieta las clavijas al sector.

Se les pidió que “lleven a cabo un examen en profundidad” sobre los obstáculos a la competencia, la seguridad de los datos personales y el respeto de los derechos de los usuarios, anunció el ministerio de Industria y Tecnologías de la Información (MIIT). Deben “tomarlo en serio” y adoptar medidas, advirtió.

Desde hace unos meses las autoridades se muestran intransigentes sobre estos temas y varios pesos pesados del sector han tenido problemas por prácticas hasta ahora toleradas y generalizadas.

Además de los gigantes de internet Alibaba, Tencent y ByteDance (empresa matriz de TikTok), el “Uber chino”, Didi, forma parte de las compañías convocadas.

Esta empresa ya es objeto de una investigación por recopilar datos privados. El procedimiento se lanzó después de que entrara en Wall Street, una decisión que Pekín no veía con buenos ojos.

En marzo el regulador ya convocó a pesos pesados tecnológicos para abordar la seguridad en línea.

Las empresas digitales se han beneficiado durante mucho tiempo en China de una legislación relativamente laxista, sobre todo en lo que respecta a los datos. Y la ausencia de competidores extranjeros permitió que surgieran gigantes locales.

El gigante chino del comercio electrónico Alibaba fue el primero en sufrir represalias y en ser condenado a una multa de 2.300 millones de euros (2.700 millones de dólares) por obstrucción a la competencia.

Desde entonces las autoridades extendieron a otros sectores su campaña para endurecer las regulaciones.

En un contexto de rivalidad con Washington, China también considera endurecer las condiciones para que sus empresas coticen en el extranjero. Para poder hacerlo deberán ser primero irreprochables en materia de ciberseguridad, según una serie de directrices todavía incompletas.

El viernes el Buró Político, el máximo órgano del Partido Comunista, insistió en la necesidad de “mejorar la reglamentación”, informó la televisión pública CCTV.

Con información AFP