Los smartphones se han convertido, desde hace varios años, en una herramienta casi infaltable para las personas. Además de las funciones básicas de un celular, como realizar y recibir llamadas, los avances tecnológicos han centralizado una enorme variedad de oportunidades en un mismo dispositivo.

Navegar por internet y acceder a redes sociales, capturar fotografías y registrar videos, realizar operaciones bancarias, chatear, ver películas, escuchar música, orientarse a través de mapas o GPS, editar y visualizar archivos, son solo algunas de las numerosas posibilidades que ofrecen los smartphones a sus usuarios. Sin embargo, estas se logran a partir de aplicaciones que, poco a poco, ocupan el espacio disponible y afectan su funcionalidad.

A raíz de su uso diario, la memoria de los smartphones almacena información progresivamente, mediante la recepción de archivos, captura de fotografías, registro de videos, caché de Internet, etc. Por esta razón, es recomendable eliminar datos innecesarios en el teléfono, los cuales ralentizan su operación y afectan radicalmente sus funciones.

Por ejemplo, una de las aplicaciones más utilizadas y con mayores efectos en la memoria de los dispositivos móviles es WhatsApp. En principio, la aplicación no ocupa tanto espacio, sin embargo, a medida que se va utilizando, almacena mensajes, audios, videos, fotos y archivos que terminan afectando la capacidad del artefacto.

La ruta para conocer los efectos de WhatsApp en la memoria del teléfono consiste en acceder a la opción ‘Ajustes’, posteriormente, seleccionar ‘Almacenamiento y datos’ para desplegar el menú correspondiente. Una vez allí, se debe pulsar el ítem ‘Administrar almacenamiento’, la ventana emergente detallará las GB o MB ocupadas por los archivos multimedia de la aplicación, así como la capacidad de memoria disponible del dispositivo móvil.

Bajo la gráfica inicial aparecerá el listado con todos los chats que almacenan algún archivo multimedia. De esta manera, el usuario podrá eliminar los datos que considere para optimizar la memoria de su celular.

Los juegos y su capacidad para saturar la memoria del celular

Los videojuegos suelen cautivar a miles de audiencias para que participen a través de sus dispositivos móviles, sin embargo, vale mencionar que un smartphone no ofrece la misma capacidad y funcionalidad que una consola especializada, como Play Station o Xbox.

Algunas personas instalan un juego, los disfrutan por un tiempo y luego olvidan desinstalarlo. En ese sentido, aunque la aplicación no se use, sigue presente en el dispositivo, ocupando memoria y afectando eventualmente la velocidad y eficacia con la que habitualmente funciona. Así mismo, algunos juegos no “corren” en determinados smartphones, pues requieren algunas condiciones específicas para garantizar una óptima experiencia a los usuarios.

Para reducir el riesgo de que la descarga de videojuegos afecten la velocidad y correcta operación del dispositivo móvil, es importante eliminar aquellas aplicaciones que no son necesarias y no reciben un uso diario.

Algunos videojuegos requieren bastante memoria y garantías técnicas en el smartphone para funcionar exitosamente. | Foto: Europa Press 2020

Facebook y aplicaciones con constantes actualizaciones

La aplicación insignia de la compañía Meta, Facebook, sigue siendo la más usada en todo el mundo. De acuerdo con el informe Digital 2022, realizado por We Are Social y Hootsuite, para el mes de enero, la red social acumulaba 2.910 millones de usuarios, seguida de YouTube y WhatsApp.

Las frecuentes actualizaciones que requiere Facebook obliga a sus usuarios a realizar constantes descargas de datos para seguir usando la aplicación. Esta dinámica, por supuesto, termina afectando notablemente la capacidad de memoria del dispositivo y lo hacen más lento.

En ese sentido, una recomendación útil implica desactivar las actualizaciones automáticas del dispositivo, pues, aumenta el riesgo de “colapsar” ante la descarga simultánea de datos para actualizar las aplicaciones instaladas.

¿Lento al cargar?

Dejando a un lado las aplicaciones, algunos usuarios notan que sus dispositivos funcionan más lento cuando están cargando. Este comportamiento también tiene que ver con el estado del cargador y el deterioro que ha sufrido el mismo. De igual manera, las aplicaciones instaladas también influyen en el uso de la batería y pueden afectar el consumo de energía.

De manera general, algunos dispositivos permiten visualizar cuáles son las aplicaciones que más memoria ocupan o que requieren mayor energía para funcionar. En caso de que su efecto sea demasiado grande o en la lista figuren aplicaciones que no son de importancia, es recomendable eliminarlas.