Los primeros elementos de investigación sobre el pirateo de que fue víctima Twitter el miércoles apuntan a un ‘topo‘ y suscitan numerosas dudas sobre la integridad de la elección presidencial estadounidense o sobre la seguridad de la cuenta de Donald Trump, que tiene intención de permanecer en la red social. Los mensajes, que en su gran mayoría fueron borrados, aparecieron en las cuentas de numerosos usuarios de elevada notoriedad.
La cuenta del presidente Donald Trump, usada permanentemente por el mandatario, no se vio afectada. Trump cuenta con 83,5 millones de seguidores en la red. La portavoz de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, afirmó que "el presidente permanecerá en Twitter" y aseguró que la Presidencia no está preocupada por las vulnerabilidades de la red social que salieron a la luz el miércoles. Entre las cuentas atacadas figuran las de personajes políticos de primer plano, como el candidato demócrata a la presidencia Joe Biden, el exjefe de Estado Barack Obama o el exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg. En los textos se le decía a la gente que tenía 30 minutos para enviar 1.000 dólares en bitcoin y que se les devolvería el doble. "Hemos detectado lo que creemos fue un ataque tecnológico coordinado por individuos que atacaron con éxito a algunos de nuestros empleados que tenían acceso a nuestros sistemas y herramientas internas", explicó Twitter. "Ha sido una dura jornada para nosotros", admitió el jefe de la red social, Jack Dorsey. "Todos nos sentimos muy mal por lo que pasó. Estamos haciendo un diagnóstico y compartiremos todo lo que podamos una vez entendamos mejor lo que sucedió exactamente", añadió. El sitio Blockchain.com, que monitorea las transacciones en criptomonedas, dijo que unos 12,58 bitcoins, equivalentes a unos 116.000 dólares, fueron enviados a la dirección de mail mencionada en los tuits del fraude.
Con las elecciones presidenciales a poco más de tres meses, la ciberseguridad en redes sociales se transformó en uno de los grandes temas de debate. Unas horas antes del ciberataque del miércoles, el Comité de Supervisión y Reforma de la Cámara de Representantes solicitó el nombramiento de un superagente nacional de ciberseguridad. Reflejo del creciente rol de las redes sociales en la vida pública, dichas plataformas se han convertido en herramientas geopolíticas esenciales, especialmente en tiempos de crisis.