Un error con una actualización opcional de Windows 11 ha provocado que los equipos donde se ha instalado experimenten la pantalla azul de la muerte y el reinicio en el modo de recuperación, un problema que actualmente investiga Microsoft.
La actualización acumulativa Windows 11 KB5043145 incluye una serie de errores que están provocando la aparición de la pantalla azul de la muerte y la pantalla verde de la muerte en los equipos donde se ha instalado.
Los usuarios afectados experimentan tras su instalación el bloqueo del equipo o la entrada en un bucle de reinicio que termina en la activación del modo recuperación, como recogen en Windows Latest. Y aunque se trata de una actualización opcional, algunos usuarios han experimentado su instalación de manera automática.
Microsoft ha confirmado al medio citado que son conscientes de estos problemas y que están investigando los informes de los usuarios afectados. El fallo parece afectar las versiones 22H2 y 23H2 de Windows 11.
¿Qué es la pantalla azul de la muerte?
Este término se utiliza para referirse a un error crítico en los sistemas operativos Windows que indica un fallo grave en el sistema. Cuando ocurre, la pantalla se vuelve azul y muestra un mensaje que incluye un código de error y, en ocasiones, información adicional sobre el problema. Este tipo de fallo puede ser causado por problemas de hardware, controladores de dispositivos incompatibles o fallos en el software del sistema.
La pantalla azul de la muerte interrumpe el funcionamiento del sistema operativo, obligando al usuario a reiniciar el ordenador. Aunque puede resultar frustrante, a menudo proporciona pistas sobre la causa del problema, lo que puede ayudar en el diagnóstico y la resolución del mismo.
De acuerdo con la página de soporte técnico de Microsoft, hay algunos pasos básicos que se deben seguir para resolver el problema de manera efectiva:
- En primer lugar, si se ha agregado un nuevo hardware, es recomendable apagar el equipo, retirarlo y reiniciar para que los cambios se reflejen correctamente.
- Otra opción es iniciar el ordenador en modo seguro, una función de arranque que permite iniciar el sistema operativo con un conjunto mínimo de controladores y servicios. Esto es útil para diagnosticar y solucionar problemas, ya que permite ejecutar Windows solo con los componentes esenciales, evitando que se carguen programas y controladores que podrían estar causando conflictos o fallos.
- También se debe verificar que haya suficiente espacio de almacenamiento, dado que el sistema operativo y algunas aplicaciones requieren de espacio libre para crear archivos de intercambio, entre otras funciones. Lo ideal es mantener entre un 10% y un 15% de espacio disponible.
- Finalmente, si el problema persiste, es importante buscar soporte técnico en Windows para recibir un tutorial o una guía práctica que ayude a determinar la causa de la falla.
*Con información de Europa Press.