Semana.com habló con Hilda María Pardo, representante de Comcel (Claro) y con Saúl Kattan, presidente de ETB para entender la discusión. ¿Por qué la ETB le cobra este monto a Comcel? Pardo explica que el caso es similar a cuando un arrendatario decide no pagarle sus obligaciones al dueño de un local, quien por supuesto, acudiría de inmediato a la justicia. En el caso de los operadores, ETB y Comcel (hoy Claro), firmaron un contrato de interconexión, que le permitía a la empresa bogotana, conectarse con las redes móviles para que sus usuarios pudieran llamar. El caso es que la ETB no pagó la cifra acordada por haber tomado el servicio, así que Comcel acudió a la justicia para hacer valer sus derechos. Los pleitos iniciales vienen desde 1996. El problema es que la ETB exige que se le cobre una tarifa por uso de red que se había pactado pero después la modificó la Comisión de Regulación de Comunicaciones, CRC. Comcel alega que todos los operadores deben pagar igual, pues las reglas son para todos. La justicia colombiana le dio la razón a Comcel en 12 fallos emitidos por árbitros, jueces y magistrados de altas cortes y le ordenaron a la ETB pagar 87 mil millones de pesos por el uso de su red. Después de seis años y de una orden de embargo, finalmente la ETB pagó la deuda en 2012 y aquí se suponía que ya se cerraba el caso. Sin embargo, como la compañía bogotana no estaba de acuerdo con la decisión y ya no había más instancias dentro del país a quién acudir porque todas le dieron la razón a Comcel, ETB fue a una instancia internacional y demandó a Colombia (no a Comcel) ante el Tribunal Andino de Justicia. Este organismo rechaza el caso en una primera instancia, pero la ETB insiste y en la segunda ocasión, el Tribunal condena a la República de Colombia, mediante el Consejo de Estado y le ordena anular los fallos favorables a Comcel para convocar de nuevo a los Tribunales de Arbitramiento. Nunca antes había ocurrido que se demandara a un país, pues siempre las demandas son contra las empresas en conflicto. Se condenó entonces a Colombia porque el Consejo de Estado no había hecho una consulta prejudicial, es decir, que en un asunto de interconexión se debieron estudiar las normas de los países andinos para ver si hay conflictos. ¿Demanda a Colombia? Según Pardo, esto es absurdo y fuera de contexto porque esa solicitud se debió haber hecho en el momento en que se ejecutaron los procesos judiciales de Colombia. Según Kattan, con la decisión del Tribunal Andino, la ETB demostró que tenía la razón y que en efecto Comcel debe devolverle cerca de 215 mil millones de pesos con intereses. Pardo asegura que el Tribunal nunca habló de dinero sino de anular el proceso anterior y volver a empezar. Se le ordenó a Colombia declarar nulos los fallos arbitrales. Tampoco había ocurrido que una instancia internacional interviniera en un fallo del Consejo de Estado. El Consejo tarda ocho meses en analizar la situación y de repente, en 2011, llegó una sanción a Colombia por demora en el pronunciamiento del tema. Como era la primera vez que pasaba este caso en el país, no había un procedimiento legal para incluir una decisión del Tribunal Andino. Aparece entonces un proceso llamado “encuadernación” y no hay en este caso un procedimiento para defenderse, explica Pardo. El Consejo de Estado, en efecto ordena anular los fallos, volver a iniciar procesos en los Tribunales, y además ordena a Comcel devolverle la plata a la ETB. El tema del dinero no lo había solicitado el Tribunal, según la directiva de Comcel, sino que lo agregó el Consejo de Estado. Surge un nuevo conflicto, pues una autoridad debe definir el monto exacto en cuestión. Aquí inicia de nuevo el proceso desde ceros. No le han dado la razón a ninguna de las partes, simplemente se pidió que la justicia estudiara de nuevo el caso, incluyendo el análisis de las normas de países andinos que había hecho falta. Comcel acude entonces de nuevo a los tribunales para defender su posición. Se espera que en cuatro meses haya un nuevo fallo. Hoy Comcel calcula que con intereses el monto en juego va en 180 mil millones de pesos mientras que ETB calcula 215 mil millones de pesos. Comcel constituyó una garantía bancaria como respaldo de cualquier devolución de dinero que eventualmente le ordene la justicia. Los seis Tribunales ETB entuteló a la Cámara de Comercio alegando que no podía volver a convocar los Tribunales, pero no le dieron la razón. Hoy hay seis tribunales de arbitramento de Comcel contra ETB. Recién se presentó otro que incluye los períodos de 2006 a 2008 que son 140 mil millones de pesos más contra ETB. Según la ETB, dos de esos seis tribunales han fallado a favor de la firma bogotana. Ambos Tribunales solicitaron la interpretación prejudicial al Tribunal Andino de Justicia, es decir, lo que hizo falta la primera vez que se instauraron los tribunales y por lo que demandó ETB que terminó en que se ordenara anular esos primeros fallos que le daban la razón a Comcel. La ETB logró que los tribunales fueran nuevos, es decir, que se convocaran de nuevo ya que Comcel pretendía que fueran los convocados por ellos mismos. ETB presentó un proceso ejecutivo o un embargo contra Comcel exigiendo el pago, pero para los ojos de Comcel, no es válido un cobro con este sistema, pues para ser ejecutivo, necesita un título o un documento que demuestre el valor real que se cobra. Lo cierto es que en este caso no lo hay ya que la decisión del Tribunal Andino no menciona cifras, solo obliga a echar para atrás los fallos. Según la ETB, este 10 de abril, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca confirmó que Comcel debe pagarle 153 mil millones de pesos más intereses y le ordenó un embargo. Sin embargo Claro desmiente el hecho y dice que la orden del Tribunal es continuar con la ejecución de la deuda que alega la ETB, y a la que Comcel apeló.