Una de las dificultades que enfrenta Netflix en Latinoamérica, es que solo ofrece la opción de pago con tarjeta de crédito. Se estima que apenas 6 millones de colombianos tienen tarjeta de crédito, pero incluso estos usuarios todavía temen pagar por internet o no les gusta que una cifra mensual de 14.000 pesos se cobre en dólares ya que se difiere a 12 o 24 meses. Claro lanzó el año pasado en Colombia, una plataforma similar a Netflix conocida como Claro Video que les permite a los clientes de internet de la compañía, pagar por el servicio de video 10.000 pesos más que se suman a su factura mensual. Más barato que Netflix que cuesta 14.000 pesos mensuales y más fácil de pagar. En México y en Brasil, Netflix ya permite tarjetas débito y sistemas prepago en tiendas de consumo masivo como Oxxo. En Colombia, el modelo aplicado a la amplia red de distribución de Baloto y puntos de chances y apuestas, le permitirían al servicio volverse masivo. Kari Pérez, gerente de relaciones públicas de Netflix Latinoamérica, cuenta que el modelo se está probando primero en estos países para luego implementarlo en el resto de la región. Un primer experimento en 2013, en las tiendas Oxxo de México no tuvo los mejores resultados, mientras que el pago con débito ha sido exitoso. La implementación del pago con tarjeta débito es más simple ya que requiere agregar un sistema de pago más a su plataforma de pagos en línea mientras que el pago en puntos de venta o de carga prepago es más complejo ya que implica que los usuarios entiendan cómo funciona la activación de la cuenta y que en los puntos de venta también entiendan el modelo. Hay usuarios que se quejan porque en iTunes se encuentran algunos títulos más pronto que en Netflix. Al respecto, Kari Pérez recuerda que iTunes vende por separado cada contenido, así que allí con lo que se compra una sola película, en Netflix se adquiere contenido ilimitado. “No nos gusta la letra chiquita”, dice Pérez para enfatizar en que Netflix no tiene planeado ofrecer contenidos premium como pagar por un estreno como lo hace Claro Video. Su oferta seguirá siendo simple: contenido ilimitado por una única cuota, sin complicar al usuario con opciones. La fiebre de House House of Cards, la serie exclusiva de Netflix, está en la boca de los miembros de alto gobierno, literalmente hasta en la China. Es la primera vez que una serie nativa de internet logra tal impacto y le gana a otras de la industria tradicional de televisión, en los premios Emmy y Globo. Esta fue la primera apuesta de Netflix por tener un valor agregado ya que hoy, después de casi 3 años de su llegada a Latinoamérica, no es la única plataforma de video por demanda en línea. Claro Video, Caracol Play, Moviecity Play y HBO Go compiten también por los usuarios. Además de haber estrenado este mes la segunda temporada de House of cards, este año se estrenan también las segundas temporadas de otras series exclusivas de Netflix como Orange is the new black, Hemlock Grove, Derek, la tercera temporada de Lilyhammer y más episodios de la serie infantil Turbo. ¿Por qué llegan tarde los títulos? El sistema ofrece hoy el triple de contenidos de los que se ofrecían en 2011 y frecuentemente están evaluando cuáles se ven más en cada mercado para decidir si vale la pena renovar las licencias de uso con los productores. Y aunque todavía existe el mito de que esta plataforma solo ofrece contenidos viejos, lo cierto es que cada vez la distancia entre un estreno de cine y Netflix es más corta. Incluso series como Dexter han llegado primero a Latinoamérica que a Estados Unidos. Películas como The Hobbit y Los amantes pasajeros de Almodóvar, llegaron a Netflix a las pocas semanas de su estreno en cine. Hay que entender que no es capricho de Netflix, estrenar una serie o película tarde. Los productores, desde los de Hollywood como Disney, Dreamworks o Universal hasta los locales como Caracol o RCN, siguen una lógica de mercado conocida como ventanas de exhibición, que consiste en explotar primero un producto en salas de cine, luego en venta de DVD, alquiler o VOD como Netflix, canales premium, TV paga y al final TV abierta. Netflix ha comprobado que a los pocos meses de entrar en un país, los índices de piratería de video bajan drásticamente porque los usuarios encuentran que es más económico y seguro este servicio, en vez de comprar DVD piratas o invertir horas de tiempo descargando una película. Pérez considera que Netflix no acaba con la TV tradicional pero sí la complementa. Netflix nunca podrá competir con deportes y realities. En cambio el estreno de una nueva temporada en televisión, puede tener más éxito impulsada por Netflix ya que antes del estreno los usuaros reviven las temporadas anteriores en este sistema. Cuando Breaking Bad fue cancelada en TV, la audiencia se pasó a verla a Netflix, trasladando el éxito de una pantalla a otra. Netflix suma 44 millones de usuarios en el mundo. Y aunque se desconoce la cifra por región y por país, en su primer año de presencia en Latinoamérica, es decir, para 2012, un millón de usuarios provenían de estos países.