El territorio colombiano, conocido por su increíble biodiversidad, ha sido testigo de un nuevo e importante hallazgo en el campo de la ornitología, la rama de la zoología encargada del estudio de las aves.
Hace apenas un mes, en el Parque Natural Tamá, ubicado en Norte de Santander, el biólogo y ornitólogo Luis Alberto Peña descubrió una nueva especie de picaflor jamás registrada en el país: el Pinchaflor de Mérida considerado como uno de los más bellos del mundo.
Este descubrimiento representa acontecimiento importante en el estudio de las aves en Colombia, ya que el Pinchaflor de Mérida (Diglossa gloriosa), que previamente solo había sido avistado en los Andes venezolanos ahora se suma al amplio inventario de especies de aves que habitan en territorio colombiano.
“Este nuevo registro aumenta el número de aves en el país, lo que destaca la enorme biodiversidad que tenemos”, comentó el biólogo Peña tras el hallazgo.
Zonas de frontera, tesoros por descubrir
El biólogo enfatizó la importancia de continuar explorando las zonas de frontera del país, donde muchas especies aún esperan ser descubiertas. Sin embargo, estas áreas han sido históricamente afectadas por el conflicto armado, lo que ha dificultado el acceso y el desarrollo de investigaciones.
“Hay muchas especies por descubrir en estas zonas. Aunque el conflicto ha sido un obstáculo, el proceso de paz ha permitido que poco a poco se pueda investigar más en estos territorios”, señaló Peña.
Con la firma del proceso de paz, cada vez más investigadores y extranjeros han comenzado a viajar a regiones previamente inaccesibles, atraídos por la riqueza natural de Colombia. “Las aves no entienden de fronteras”, afirmó el ornitólogo, destacando la necesidad de seguir investigando en áreas fronterizas y zonas menos exploradas del país.
Colombia, conocida como la “casa de las aves”, es uno de los países con mayor diversidad ornitológica en el mundo. Regiones como el Caquetá, la Sierra Nevada de Santa Marta, el Valle del Cauca y la zona cafetera son reconocidas por albergar algunas de las aves más hermosas y representativas del país.
Luis Alberto Peña menciona que lugares como el kilómetro 18 en la vía Cali son puntos clave para el avistamiento de aves, pero también se destacan otras áreas como los Llanos Orientales, los Andes, el Pacífico y la Amazonía, todas ellas con un inmenso potencial para nuevos descubrimientos.
De acuerdo con la Asociación Colombiana de Ornitología, en Colombia se registran alrededor de 1.968 especies de aves, mientras que la plataforma eBird el registro asciende a 1.933 especies. Esta última sitúa a Colombia en el primer lugar mundial en diversidad de aves, seguida por Perú, Brasil, Indonesia y Ecuador.
El descubrimiento del picaflor refuerza la posición de Colombia como un líder mundial en biodiversidad y abre la puerta para futuras investigaciones en áreas poco exploradas. Según Peña, es vital que se sigan destinando esfuerzos y recursos para estudiar la fauna en las zonas de frontera y otros territorios con acceso limitado, ya que aún queda mucho por descubrir.
La riqueza ornitológica de Colombia continúa siendo un atractivo para investigadores de todo el mundo, y el reciente hallazgo en Norte de Santander resalta la importancia de preservar y estudiar los ecosistemas del país.
En cuanto a preferencias en el avistamiento de aves, Luis Alberto indicó que para los expertos, lo más llamativo en Colombia son las aves endémicas, estas que se encuentran solo en un área específica. Pero también los colores y algunas formas raras, hacen parte de las preferencias de quienes se dedican al aviturismo pero también al estudio de las especies.
Si pasamos a las regiones y de acuerdo con el experto, el ave más representativa en el Caribe sería el Cardenal Guajiro (Cardinalis phoeniceus), en la región Andina, el Tangara Multicolor (Chlorochrysa nitidissima), en la Orinoquía, el Corocoro Rojo (Eudocimus ruber), en Amazonas, el Águila arpía (Harpia harpyja) y en la región Pacífica, el Compás (Semnornis ramphastinus).
Los descubrimientos no solo enriquecen el conocimiento científico, sino que también posicionan a Colombia como un destino clave para el ecoturismo y el avistamiento de aves. El país ha mantenido su liderazgo en la identificación de nuevas especies, consolidándose como el número uno en los últimos años.