Viajar con solo equipaje de mano es una tendencia cada vez más popular entre los pasajeros, especialmente aquellos que buscan evitar los costos adicionales y las largas esperas en las cintas de equipaje. Sin embargo, la restricción de espacio puede convertirse en un desafío, especialmente cuando se intenta empacar todo lo necesario para el viaje.
El primer paso para optimizar el espacio en el equipaje de mano es planificar con antelación lo que realmente se necesita llevar. Es fácil caer en la tentación de empacar “por si acaso”, pero este enfoque puede llevar a un equipaje innecesariamente voluminoso. Antes de comenzar a empacar, es recomendable hacer una lista de los elementos esenciales para el viaje, teniendo en cuenta el clima, la duración del viaje y las actividades previstas.
Además, es importante investigar las restricciones de equipaje de la aerolínea con la que se va a volar. Cada aerolínea tiene diferentes políticas en cuanto al tamaño y peso permitido para el equipaje de mano. Asegúrese de conocer estas restricciones ayudará a evitar sorpresas en el aeropuerto y optimizar el espacio disponible.
Una vez que se ha determinado lo esencial, el siguiente paso es empacar de manera eficiente. Una de las técnicas más populares para maximizar el espacio en el equipaje de mano es el enrollado de la ropa. En lugar de doblar las prendas de forma tradicional, enrollarlas permite un mejor aprovechamiento del espacio y ayuda a reducir las arrugas. Las prendas pequeñas, como camisetas y pantalones ligeros, se pueden enrollar y colocar en los espacios libres entre otros artículos más voluminosos.
Otra opción es utilizar bolsas de compresión o cubos de embalaje, que ayudan a organizar y comprimir la ropa. Estas herramientas son especialmente útiles para los viajeros que necesitan llevar más prendas de las que cabrían en un equipaje de mano estándar. Además, los cubos de embalaje permiten mantener el equipaje organizado, facilitando la búsqueda de artículos durante el viaje sin desordenar todo el contenido.
En cuanto a los líquidos y artículos de aseo personal, es importante recordar que las aerolíneas suelen tener restricciones estrictas sobre la cantidad de líquidos que se pueden llevar en el equipaje de mano. Se recomienda optar por productos en formato sólido, como champú en barra o desodorante sólido, o transferir los líquidos a envases pequeños que cumplan con las regulaciones. También es útil agrupar estos artículos en una bolsa transparente y accesible para facilitar el control de seguridad.
Un truco poco conocido pero altamente efectivo para optimizar el espacio es utilizar el interior del calzado para guardar pequeños objetos. Los zapatos son a menudo uno de los artículos más voluminosos en el equipaje, pero su interior es un espacio ideal para almacenar calcetines, cinturones o accesorios. Además, se recomienda llevar el calzado más pesado puesto durante el vuelo para liberar espacio en el equipaje de mano.
La selección del calzado también es clave. Es aconsejable limitarse a dos pares de zapatos: uno cómodo y versátil que se pueda usar en la mayoría de las situaciones, y otro más especializado si es necesario para actividades específicas. De esta manera, se evita ocupar espacio innecesario con múltiples pares de zapatos que podrían no ser utilizados.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.