Si bien es cierto que viajar al exterior sigue siendo considerado como un privilegio, para millones de personas en el mundo, por la cantidad de dinero que se necesita, también existen otras opciones que no requieren un gasto excesivo de dinero, teniendo en cuenta tanto el vuelo como la estadía en el destino.
Esta oportunidad de viaje la confirma el portal World Packers, que cuenta con más de 200.000 reseñas y anfitriones en más de 140 países, con los que logró realizar un listado de los destinos a los que se puede viajar sin necesidad de gastar una millonada y, aun así, vivir una gran experiencia.
En el listado indica que entre los destinos más baratos para viajar en Europa, lejos del continente americano, se encuentran la región de los Balcanes —Albania, Bosnia y Herzegovina, Bulgaria, Macedonia, Montenegro y Serbia, este último considerado el destino más barato en Europa—.
Pese a que este lugar no cuenta con buena fama entre los turistas occidentales, la verdad es que tiene mucho por ofrecer y lo mejor de todo, a precios asequibles, con atracciones como castillos medievales, playas de ensueño en el Mar Adriático y amplios paisajes de montañas, todo a un costo bajo.
De acuerdo con el sitio Guía Low Cost, viajar a Serbia puede ser una gran elección, especialmente en primavera o verano y estos son algunos de los mejores lugares que se pueden visitar:
1. La Ciudad de Subótica
Se encuentra cerca de la frontera húngara, lo que quiere decir que también se puede llegar fácilmente desde Budapest. Este lugar se destaca por sus edificios modernistas y, pese a que no es demasiado grande, sí tiene mucho encanto gracias a sus monumentos.
2. La Fortaleza de Golubac en el Parque Nacional de Djerdap
Este lugar es catalogado como Patrimonio Cultural y parece que fue construido a principios del siglo XIII. Se trata de uno de los sitios más visitados por las rutas en barco por el Danubio.
En este destino el río se convierte en un gran lago gracias a la presa Djerdap, que llega hasta 7 kilómetros de ancho. Allí se recomienda acercarse hasta la Tabla de Trajano que data del año 103.
3. El Parque Nacional de Fruska Gora
Este parque está conformado por más de 10 monasterios ortodoxos medievales, por lo que también se le conoce como la Montaña Sagrada, cuyos edificios fueron construidos durante los siglos XV y XVI, siendo parte fundamental de su historia y cultura.
Una de sus zonas más recomendadas para visitar es la Torre de Televisión bombardeada el año 1999, un espacio que recuerda el conflicto que marcó un antes y un después en la historia de Serbia.
4. El Monasterio de Krušedol
Es el punto más visitado del Parque Nacional de Fruska Gora, probablemente por su cercanía a Novi Sad. Fue fundado en el siglo XVI y está decorado con espectaculares pinturas que datan del siglo XVIII.