Conectar dos de las ciudades más vibrantes del mundo, Londres y Nueva York, es uno de los tantos grandes avances que ha tenido el transporte aéreo. Esta ruta transatlántica, una de las más transitadas del planeta, ofrece diversas opciones para que los viajeros elijan según su tiempo, presupuesto y preferencias.
Hasta ahora, la opción más rápida y popular es el avión tradicional, con operación en diferentes aerolíneas, las cuales ofrecen vuelos que suelen durar entre siete y ocho horas, tiempo que para muchos se convierte en un dolor de cabeza.
Décadas atrás, había sido el Concorde el que ofrecía esa ruta a velocidad supersónica.
Y ahora, que cada vez se siguen implementando nuevos avances en la industria aérea aprovechando la evolución de la tecnología, el propósito es crear rutas que continúen transformando la manera de explorar destinos en el mundo.
Prueba de ello es la noticia que se conoció hace unos días sobre el proyecto del vuelo más largo del mundo que podría llegar en 2026, que espera acabar con “la tiranía de la distancia” de los australianos, según The Independent.
Este proyecto, conocido como Sunrise y liderado por la aerolínea australiana Qantas, estaría a un paso de conseguir su objetivo luego de casi siete años trabajando para desarrollarlo. “El plan es crear un vuelo sin escalas desde Sídney a Londres y Nueva York”, explicó el medio citado anteriormente.
Viajes en tiempo récord de Londres a Nueva York
Esta iniciativa de volar en menos tiempo representaría un gran beneficio para millones de viajeros en el planeta y, por supuesto, significa un gran desafío para la industria de la aviación.
Todo parece ir por muy buen camino, ya que, además de este proyecto, hay otros que se están llevando a cabo, como el primer avión de pasajeros supersónico desde el Concorde que podría estar en los cielos en 2030, ofreciendo un vuelo de solo tres horas y media de Londres a Nueva York.
Overture es el nombre de esta aeronave construida desde el Concorde. Esta nueva idea está siendo desarrollada por la empresa Boom Supersonic, con sede en Colorado, señala la revista especializada en turismo Time Out.
Según este medio, el proyecto ya realizó sus primeras pruebas con éxito de un modelo a escala reducida, bautizado como Baby Boom, que alcanzó una velocidad máxima de 283 mph.
Esta acción fue calificada por los desarrolladores como un “hito” en el desarrollo del avión a escala real, según The European.
No obstante, la idea es que Overture viaje al doble de velocidad que los aviones subsónicos clásicos, alrededor de 1.050 mph, reduciendo a la mitad el tiempo de viaje entre Nueva York y Londres, a tres horas y media, y de Londres a Miami a poco menos de cinco horas.
Entre tanto, la compañía afirma que existen alrededor de 600 rutas rentables que podría tomar el avión, aunque a causa de las regulaciones de vuelo supersónico tendrían que ser sobre el agua y no sobre tierra, detalle que no ha impedido que United, American Airlines y Japan Airlines cierren acuerdos para adquirir aviones Overture.
Teniendo en cuentas los avances y el éxito de las pruebas, se prevé que el proyecto sea una realidad en el año 2030 como pronto; sin embargo, es una fecha tentativa, no oficial.