Si usted está pensando en planear un viaje para visitar Ámsterdam, una de las ciudades más populares de Europa, hay un lugar imperdible que no puede dejar de visitar: el emblemático Rijksmuseum.
Este gran museo guarda más de 8.000 obras representativas de los Países Bajos, entre las que se incluyen obras maestras de Vermeer, Rembrandt y Van Gogh.
Razones para visitar el Rijksmuseum
Este museo cuenta la historia de 800 años de historia holandesa, incluido el siglo XVII, también conocido como la Edad de Oro holandesa.
Es uno de los museos más emblemáticos de Holanda y desde su fundación en 1800, ha desempeñado un papel fundamental en la conservación y exhibición del arte y la historia holandeses.
La vasta colección del museo ofrece una visión de 800 años de patrimonio cultural holandés, que parte desde la Edad Media hasta la época moderna.
Además, recoge un importante número de obras del arte neerlandés y europeo, recorriendo una historia de más de ocho siglos.
Son muchos los famosos cuyas obras están expuestas en sus pasillos. Se destacan los lienzos de Frans Hals, Johannes Vermeer o Rembrandt y su inconfundible Ronda de noche.
Es un viaje en el tiempo que se inicia desde el momento en el cual pisa su primera planta en donde encontrará esculturas medievales y piezas arqueológicas de la Antigüedad. A medida que ascienda por las plantas, atravesará periodos que incluyen el arte renacentista hasta los tiempos modernos en el nivel 2, de acuerdo a lo que se registra en el portal Explorial.
Pero para poder disfrutar de todos los encantos que ofrece este museo, usted deberá disponer de un buen tiempo para recorrerlo. Es así como se recomienda que cuente con 5 o 6 horas para poder apreciar la totalidad de las exposiciones que revelan gran parte de la historia de los Países Bajos.
Eventos especiales en el museo Rijksmuseum
El museo abre todos los días de 9.00 a.m. a 5:,00 p.m., con horarios ampliados algunos días. Lo mejor es que compre las entradas por Internet con antelación, ya que puede estar bastante concurrido, sobre todo en temporada alta.
Además de su colección permanente, el Rijksmuseum programa varias exposiciones a lo largo del año, las cuales, por lo general, se centran en artistas o temas específicos y ofrecen una visión aún más profunda de la historia del arte holandés.
Además de estas exposiciones, el museo organiza numerosos actos, como conferencias, talleres y visitas guiadas. También hay actividades para toda la familia, como búsquedas del tesoro por las galerías, para que los más pequeños comiencen a familiarizarse con el arte.
Este museo ha desempeñado un papel decisivo en el fomento de la comprensión y el aprecio de las artes, la cultura y los acontecimientos históricos holandeses, tanto a escala nacional como internacional.
Un poco de historia de Rijksmuseum
De acuerdo al portal Tinsa, el edificio, de estética barroca, se construyó en 1885 a cargo del arquitecto Pierre Cuypers. Inicialmente, el estilo de este lugar estilo no gustó, por lo que poco tiempo después de su apertura gran parte de sus grabados, ornamentos y detalles, se sustituyeron por un estilo mucho más sobrio.
Tiempo más tarde, los españoles Antonio Cruz y Antonio Ortiz y su equipo, recobraron el tono original de la obra. El principal cambio físico ha sido la creación de un atrio de 3.000 metros cuadrados a partir de la recuperación de dos patios.
Finalmente, el recinto ocupa una superficie de 30.000 metros cuadrados, de los cuales solo 12.000 están destinados a exposiciones. Cuenta con 80 salas que albergan unas 8.000 obras de arte.
Está situado en una zona privilegiada de la capital de los Países Bajos, cerca del Museo Van Gogh, así que resulta muy fácil llegar y aprovechar para conocer una de las joyas de Europa.