Las fiestas y tradiciones son de las características más importantes que tienen los pueblos antioqueños, en los cuales cada año se realizan diversas celebraciones que los identifican y que hacen honor a su economía, pero también a sus encantos que les permiten atraer tanto a propios como a foráneos.
Uno de estos municipios es Belmira, ubicado en la subregión del Norte del departamento, que es conocido por sus majestuosos paisajes y por un hermoso páramo, un atractivo natural que reúne especies endémicas, fauna, flora y afluentes de agua. Su nombre es de origen portugués y traduce “Bello Paisaje”.
Hasta el próximo primero de diciembre este municipio celebra la versión número 38 de las Fiestas de la Trucha, un evento lleno de tradición, cultura y sabor. Quienes lleguen a este lugar para disfrutar de estas festividades pueden disfrutar de la música, las danzas y los platos típicos que hacen de Belmira un destino único.
Con este evento, que se realiza cada año, sus habitantes buscan resaltar el amor por la pesca, la naturaleza y sus tradiciones. Además, es la oportunidad perfecta para cuidar y recuperar el entorno natural y cultural de esta región del departamento.
En el marco de la celebración, se realizan actividades como el concurso nacional de pesca, desfile de mitos y leyendas, festival de carros de rodillos y presentaciones musicales con diversidad de artistas.
Estas festividades están muy en línea con una de las principales actividades económicas del municipio, pues es reconocido por la abundancia en la tradicional trucha arco iris, que históricamente ha poblado sus ríos y actualmente también es cultivada en estanques, junto a la trucha gold o dorada.
Encantos de Belmira
Quienes visiten este lugar por estos días de las fiestas o en otro momento, tienen la posibilidad de conocer y disfrutar de diversos encantos que tiene este destino, uno de los más llamativos de la región debido a su diversidad natural.
El portal oficial Turismo Antioquia Travel indica que visitar Belmira, es ir en busca de la tranquilidad que ofrecen sus paisajes y la majestuosidad del páramo. Es considerado un gran destino para el turismo de naturaleza, donde se pueden realizar actividades como senderismo, avistamiento de aves, cabalgatas, tomar fotografías, compartir con el campesino sus quehaceres diarios, visitar trucheras, cascadas y deleitarse con los amaneceres y atardeceres.
Dada su vocación del cultivo de trucha, uno de los planes para desarrollar en este pueblo antioqueño es visitar la Truchera San José, que tiene más de 30 años de tradición y ha sido un referente de la región en el turismo alrededor de esta especie.
Un destino de cascadas
Otra de las cosas para admirar en Belmira son sus cascadas, las cuales abundan y están rodeadas de lindos paisajes que vale la pena conocer. Una de las más destacadas es Las Golondrinas, ubicada a unos cinco kilómetros del pueblo, y que es considerada como un tesoro hídrico en donde los turistas tienen la oportunidad de bañarse y conectar con la naturaleza.
También están la cascada La Montañita, a donde se puede realizar una caminata por un sendero ecológico y El Yerbal, que ofrece un paisaje y panorama similar a las anteriores, con un gran aporte hídrico para el municipio.
Uno de los grandes encantos naturales de este municipio antioqueño es el Páramo Santa Inés, en donde se encuentra el Mirador del Norte, uno de los atractivos ecoturísticos clave para el departamento. Allí nace más del 70 % del agua que recibe todo el Valle de Aburrá. Así mismo, está el Alto El Morro, un lugar ideal para conocer más de la biodiversidad de este encantador lugar, realizar senderismo, respirar aire puro y conectar con la naturaleza.