En el corazón del ártico sueco, en un pequeño pueblo llamado Jukkasjärvi, se encuentra uno de los destinos más fascinantes del mundo. Es un hotel hecho completamente de hielo y nieve, que ha conquistado a los amantes del arte alrededor del mundo.
Fue fundado en 1989 y no es solo un sitio para poderse hospedar por una temporada, sino que se ha convertido en una eterna obra de arte que se reconstruye cada invierno, convirtiéndose en un gran atractivo para los turistas que quieren vivir experiencias únicas, contemplando las auroras boreales.
La magia del hielo se transforma en un hotel
Cada año, este hotel es reconstruido con bloques de hielo extraídos del río Torne, un recurso natural que, además, adorna su estructura.
Entre sus curiosidades está que artistas de todo el mundo son invitados a participar en el diseño de las habitaciones, con lo cual se garantiza que cada visita que usted haga a este lugar será única e irrepetible.
Es así como durante varias semanas al año escultores y arquitectos se dan cita para trabajar en los detalles de cada habitación y en los pasillos que se iluminan naturalmente, gracias a la luz del cielo.
El interior de esta estructura se mantiene entre -5 °C y -8 °C, lo cual garantiza que el hielo conserve su forma. A demás cuenta con sacos de dormir térmicos y las pieles de reno que ofrece el hotel, lo que lo hace totalmente confortable. Todas las habitaciones son distintas. Están iluminadas por lámparas de aceite y débiles rayos de sol ártico.
Originalmente, esta estructura era estacional, sin embargo, en el 2016 se inauguró una extensión que funciona con energía solar para mantener -5 C durante todo el año, de acuerdo a lo que se registra en el portal Weekend.
En este hotel no tendrá tiempo para aburrirse, ya que en él se encontrará con los objetos de la vida de los Saami, una tribu de la región, un sauna de hielo, un cine y el Absolut Ice Bar, donde las columnas -congeladas desde 1994- sostienen una barra donde se sirven bebidas en vasos de hielo.
La estadía incluye el préstamo de ropa abrigada, traje de nieve, guantes, botas de invierno y pasamontañas. También se hace un recorrido informativo en el que se explica cómo es dormir en el frío y se dan consejos al respecto.
Pero si usted es de los que prefiere dormir un poco más caliente, no hay problema, pues puede quedarse en una habitación warm rooms o habitaciones cálidas, las cuales consisten en una serie de cabañas y chalets ubicadas en medio de la naturaleza, que cuentan con salas de estar, baño con ducha, un pequeño bar, un hervidor de agua, wifi y teléfono.
De acuerdo al portal en mención, esta estructura cuenta con 3 restaurantes y el más exclusivo de ellas en el Veranda, en donde usted podrá disfrutar del Chef’s Table, un menú de degustación que incluye entre 10 y 12 platos que se preparan frente a usted y se sirven en una mesa de madera comunal. Allí, los cocineros se reúnen con los comensales y hablan sobre los productos y la cocina, fomentando una participación activa entre todos los huéspedes.
Para aquellos que están buscando un lugar fuera de lo común para casarse, el Ice Hotel Chapel es una opción única y mágica. Cada año, una nueva capilla de hielo es construida, por lo que se convierte en un escenario fuera de lo común para quienes han decidido casarse.
La nieve y el hielo forman un marco de ensueño, perfecto para quienes desean una celebración íntima que le permitirá vivir una experiencia nupcial en el Ártico.