Los cruceros se han convertido para muchas personas en una de las opciones más válidas en el momento de planear unas vacaciones. Se trata de una modalidad de viaje que permite conocer diferentes destinos sin necesidad de cambiar de medio de transporte o de alojamiento.
A bordo de estos barcos, los turistas pueden experimentar un conjunto de sensaciones y experiencias únicas, desde la desconexión total de su rutina diaria hasta sumergirse en un mundo lleno de opciones de entretenimiento para todos los gustos.
En los cruceros los viajeros cuentan, entre otras cosas, con cafeterías, sala de fiestas, casino, piscinas o gimnasio. Viajar en este tipo de barcos es como hacerlo en un hotel flotante, un plan que se convierte en toda una aventura.
Sin embargo, es importante tener presente que, al igual que en los aviones, se deben tomar algunas precauciones a la hora de alistar el equipaje, pues no todo se puede llevar a bordo. Algunos artículos están prohibidos en la mayoría de compañías que brindan este tipo de servicio y, por ello, lo mejor es dejarlos en casa para evitar complicaciones en el momento de emprender la aventura.
Así las cosas, las autoridades portuarias tienen la potestad de requisar tanto a los pasajeros como el equipaje para confiscar cualquier artículo conocido internacionalmente como peligroso para la seguridad de los pasajeros, la tripulación y el barco. Normalmente, esos elementos son confiscados y no devueltos. Esta es la lista para tener en cuenta.
- Aparatos eléctricos que pudieran provocar un incendio como plancha de ropa, cafetera, tetera, secadores y planchas de pelo. Sin embargo, hay cruceros en los que estos dos últimos pueden estar incluidos dentro del equipaje.
- Líquidos inflamables. Aquí se incluyen líquidos para mecheros, pero también explosivos, bengalas, fuegos artificiales, petardos, velas o incienso.
- Armas, municiones, cuchillos, navajas, tijeras grandes, arcos y flechas, o material de defensa personal como esposas, gas pimienta y pistolas traumáticas.
- Algunos artículos deportivos como bates de béisbol o cricket, palos de hockey, skateboards y tablas de surf, pesas, espadas de esgrima o material de entrenamiento para artes marciales, no están permitidos en el equipaje. Tampoco se pueden empacar los zapatos con ruedas que normalmente usan los niños. Los palos de golf tampoco están habilitados para llevar en un barco.
- En cuanto a las bicicletas, son elementos que no cuentan con permiso para ser embarcadas. Es probable que en algunos cruceros haya disponibilidad de estos elementos.
- Bebidas alcohólicas. Si bien cada naviera tiene sus propias normas en torno a estos productos, lo cierto es la mayoría de ellas no los permite y los decomisan. Esto se debe a que estos barcos tienen una gran oferta de los mismos a bordo y lo aconsejable es que los viajeros los adquieran allí. Por esta razón, lo mejor siempre es preguntar e informarse sobre la política de bebidas alcohólicas.
- Cualquier dispositivo, juguete o dron que sea controlado a distancia.
- Set de tatuajes y accesorios como máquinas o agujas.
- Equipos médicos y medicamentos. Los medicamentos que son considerados como básicos en los que se incluyen las aspirinas, jarabes, efervescentes, píldoras y similares no disponen de una normativa especial y normalmente las empresas navieras dejan embarcarlos. Sin embargo, se debe prestar atención al tamaño de los medicamentos líquidos, por ejemplo. Siempre es clave asesorarse antes de viajar con el fin de evitar complicaciones en el momento de pasar los controles de seguridad.
- Mascotas. Casi todas las navieras prohíben el abordaje de mascotas. Hay excepciones cuando se trata de perros que actúan como guías, pero se debe informar a la compañía y aportar toda la documentación de la persona y del animal que lo acompaña.