Las etiquetas del equipaje son el comprobante que los viajeros reciben al enviar sus maletas por bodega y son determinantes debido a que permiten su identificación. Asegurarse de tenerlas siempre consigo aún después de llegar al destino final es muy importante, pues son necesarias en caso de que se tenga algún reclamo posterior sobre el equipaje.

Sin embargo, una de las principales recomendaciones de los expertos es que antes de iniciar un nuevo viaje se deben quitar las etiquetas de los anteriores, pues es posible que estas generen confusión para los sistemas automatizados y el personal de las aerolíneas.

Esto puede ocurrir porque las terminales aéreas utilizan sistemas de escaneo para manejar el equipaje y cuando se dejan los comprobantes de documentación anteriores pueden ser leídos accidentalmente por estos sistemas, enviando la maleta a un destino incorrecto, lo que puede derivar en retrasos y complicaciones innecesarias.

Las maletas siempre deben llevar etiquetas que las identifiquen. | Foto: virojt

También puede pasar que los trabajadores que manipulan el equipaje se confundan si la maleta tiene múltiples etiquetas, colocándola en el vuelo equivocado, lo que significa que no llegaría al mismo tiempo que el viajero.

Así las cosas, tener una etiqueta única y actualizada facilita que la maleta sea fácilmente identificada. Esto es crucial en caso de un retraso en el equipaje o de que se extravíe, ya que ayuda en el proceso de recuperación.

Normalmente, las etiquetas contienen códigos de barras que vinculan el equipaje con el viajero y con el tiquete de avión. También incluyen detalles sobre la aerolínea, el vuelo y la fecha del viaje, entre otras informaciones clave.

Otros datos

Hay datos personales que son clave y que se ponen en las etiquetas. Allí deben aparecer el nombre y los apellidos, el correo electrónico y el teléfono móvil, que lo recomendable es que tenga el prefijo nacional.

A las maletas se les deben quitar las etiquetas de viajes anteriores. | Foto: El País

En el caso de que se quiera incluir una dirección para dar más información, se puede poner la del alojamiento al que las personas se dirigen de vacaciones o, por el contrario, se puede poner la del trabajo. Una de las recomendaciones es nunca poner datos de la casa, menos aún cuando va a permanecer vacía durante varios días si se está viajando en familia.

Por otro lado, además de identificar la maleta, es conveniente llevarla bien cerrada, con un candado u otro elemento que impida que esta se pueda abrir, evitando así robos o la posibilidad de que metan en la maleta objetos que pueden convertirse en un problema. También se le puede tomar una foto a la maleta en su parte exterior, para que pueda ser reconocida ante cualquier complicación.