Recorrer Colombia es una de las experiencias más hermosas pues la variedad de sus paisajes permite disfrutar de una gran variedad de actividades en diferentes climas.
Una de las maneras de disfrutar de un buen viaje por el territorio nacional es a través de las rutas fluviales, las cuales guardan el encanto de la naturaleza y la riqueza de la biodiversidad.
Las rutas fluviales infaltables de Colombia
De acuerdo al portal de la Revista Diners estas son algunas de las mejores rutas para descubrir Colombia a través de la magnitud de riqueza entre lagos y ríos.
- Lago Tarapoto y Puerto Nariño: la ruta más recóndita
Parte del encanto de esta ruta es el contacto que se puede tener con la selva colombiana. Por esta razón al lago Tarapoto llegan turistas que están dispuestos a ver el verde y a respirar aire puro.
Para poder disfrutar de este rincón del país, los turistas deben tomar un avión desde Bogotá hasta Leticia para luego subirse a un taxi acuático y cruzar por dos horas más el río Amazonas hasta Puerto Nariño.
Este es un pueblo pequeño rodeado de verde su destino final es un pueblo pequeño, verde, aislado y apacible.
Tenga en cuenta que esta aventura acuática debe hacerla solo debe hacerla en compañía de los guías locales quienes conocen a la perfección los secretos de la selva. Esta maravilla del mundo es tan interesante como peligrosa por lo que no es solo un mito que quien no conoce corre el riesgo de perderse en ella.
Puerto Nariño, para la mayoría, es el punto de encuentro y de allí salen las expediciones al parque Amacayacu, las caminatas por la selva, las experiencias para compartir con las etnias ticuna y yagua cercanas y el viaje soñado de todos los que llegan: la excursión en bote al lago Tarapoto.
- Laguna Grande y Guacamayas, la ruta más alta de Colombia
Desde el pueblo de El Cocuy parte la expedición que lo llevará hasta los 5.000 metros en los que se encuentra la laguna Grande del Nevado del Cocuy.
Si usted viene a conquistar una de las cumbres más altas del país , debe estar dispuesto a soportar un ritual doloroso, de respiración escasa, donde el cuerpo pide que pare a contemplar el lugar espléndido que ha decidido venir a visitar.
Arriba le espera uno de los 1.528 cuerpos de agua de alta montaña del país. Una laguna de origen glaciar de gran belleza, en cuyas aguas se reflejan los picos nevados del Cóncavo, el Concavito y el Pan de Azúcar, así como el movimiento de las nubes que se mueven aprisa.
Luego podrá descender por el Parque Nacional Natural El Cocuy, en la cordillera Oriental, hasta El Cocuy, una población rodeada por la neblina y el frío.
A tan solo 14 kilómetros se encuentra otro pueblo llamado Guacamayas, que recibe las aguas del nevado y que produce algunas de las artesanías más bellas del país como vasijas y recipientes tejidos con fibras de fique.
Tenga en cuenta que para poder disfrutar de este recorrido debe registrarse en la Oficina de Parques.